Los funcionarios de los juzgados de Ciudad Real han protagonizado esta mañana una sonora pitada de protesta por los fallos del sistema informático.
Hartos de los continuos “cuelgues”, y de la lentitud con la que “por lo general”, dicen, funcionan los diferentes programas informáticos de gestión procesal han decidido salir a la calle, parar juicios y vistas (con dificultades para celebrarse), y denunciar lo que está sucediendo.
Este miércoles el sistema y sus diferentes programas, Lexnet, Minerva NOJ, Fortuny, Fidelius, etc, ha estado parado desde la hora de apertura de los juzgados hasta las doce del mediodía, según han confirmado a Lanza varios participantes en la protesta.
No pasaría nada si no fuera porque estos fallos se repiten con demasiada frecuencia.
“En condiciones normales te desesperas”, confirma Ricardo Rosales, del sindicato Justicia y Progreso: “Nosotros nos estamos planteando pedir la dimisión del subdirector general de Nuevas Tecnologías del ministerio e iniciar una recogida de firmas. Alguiente tendrá que asumir la responsabilidad”, dice.
Carmen Romero, del Sindicato de Trabajadores de la Administración de Justicia (STAJ) y presidenta de la junta de personal de justicia provincial, reconoce que la situación es grave, “lo venimos denunciando todo el año, de hecho en la última reunión de la junta de personal planteamos hacer movilizaciones. No se puede trabajar con normalidad por las continuas caídas de una o varias de las aplicaciones, cuando no es de todo el sistema como ha ocurrido hoy”.
Romero sostiene que los proyectos “papel cero” y justicia digital han contribuido a agravar la situación en todos los negociados, “problemas a diario, lentitud, esto al final lo sufre el ciudadano y repercute en el retraso general de los asuntos”.