La Protectora de Animales La Bienvenida ha instalado, en la confluencia de las calles General Aguilera y Ramón y Cajal, su ya tradicional mercadillo solidario, una iniciativa con la que, desde esta asociación, pretenden recaudar fondos para poder atender a los cerca de 140 perros y gatos que, actualmente acoge.
Su presidenta, Sara López de Mota, ha explicado a Lanzadigital que, a lo largo de todo el año, tienen que desarrollar numerosas iniciativas para recaudar fondos ya que, explicó, la subvención anual que reciben del Ayuntamiento, 56.000 euros este año, “apenas cubre los gastos de seis meses”. En este sentido ha apuntado, como ejemplo, que sólo en facturas veterinarias el gasto mensual ronda los cinco o seis mil euros, a lo que hay que sumar el coste del alimento de los animales y otras necesidades.
Así, a lo largo de todo este sábado, estarán hasta las 20,30 horas, esperan que funcione muy bien la venta solidaria de calendarios, camisetas, complementos para mascotas, lotería, peluches, etc, y diverso material que ha sido donado, o confeccionado, por particulares y comercios y obtener así más fondos para el funcionamiento de la protectora y la atención a los animales.
Además de la venta solidaria, los vecinos pueden también solventar todas las dudas que tengan sobre adopciones, acogimiento, voluntariado, apadrinamiento, así como la posibilidad de poder adoptar a alguno de los “peludos” que tiene la protectora.
Pocas adopciones
En este sentido, Sara López de Mota comentó que en Navidad “apenas aumenta el número de adopciones de perros y gatos”. Lamentó que muchas personas sigan comprando cachorros en estas fiestas como regalo “y muchos de ellos, cuando crecen, son abandonados”. “Ahora, por ejemplo, con el fin de la temporada de caza tenemos muchos galgos que han sido abandonados”, comenta.
La presidenta de la Protectora La Bienvenida insiste, como también hiciera hace unos días el Colegio Oficial de Veterinarios, en la importancia de adoptar un animal antes de adquirirlo en un comercio. Y añade que, aunque cada vez hay más concienciación, la realidad muestra como muchos de esos perros y gatos que se han regalado en Navidad acaban, meses después, abandonados y recogidos en la protectora.