A las 20.00 h. el alcalde, Pedro Ángel Jiménez, ante numerosos vecinos y vecinas, prendía la mecha de los fuegos artificiales anunciando a toda la población el encendido de la hoguera situada frente a la ermita de San Antonio Abab, señal tras la cual se hizo propio en las distribuidas por la localidad, principalmente instaladas por asociaciones y establecimientos hosteleros.
Por tercer año consecutivo, el Ayuntamiento dispuso en el recinto ferial numerosos montones de leña, acopiados por el departamento de Obras, para todo aquel que quisiera reunirse en torno a las lumbres para comer y beber junto a familiares y amigos en la víspera de San Antón.
Tras el encendido de las hogueras, tanto en la plaza de la Constitución como en el Recinto Ferial, el ayuntamiento invitó a todos los asistentes a panceta asada, tinto de verano y agua, que junto a las hogueras ayudaron a sobrellevar la fría noche.