Mal estreno el que tuvo el BM Caserío en el campeonato liguero, dentro del Grupo F de la Primera Estatal de balonmano. El equipo de Santi Urdiales fue derrotado con claridad en la pista del Ikasa BM Madrid, que confirmó su condición de favorito de nuevo para disputar la fase de ascenso al superar por goleada a los ciudarrealeños (37-22).
El BM Caserío pudo aguantar bien en la primera parte, pero se derrumbó en la segunda. Al minuto 20 del encuentro el marcador era de un empate a once goles, con los visitantes dando la cara a la perfección, pese a que en el tramo final antes del descanso los madrileños dieron un arreón para irse ganando 18-14 al refrigerio.
Fue en la segunda mitad cuando el Caserío ya no pudo contener al Ikasa Madrid. Un parcial 11-3 para los locales en los primeros quince minutos sentenciaron el encuentro definitivamente con el 29-17. Hasta el final esa ventaja se amplió algo más para terminar con un contundente 37-22 y con una primera derrota clara para el conjunto amarillo de Ciudad Real.
Por el Caserío el máximo goleador fue Pablo Campanario, con seis goles, seguido de Álex Abad, que hizo cinco. El máximo goleador del choque fue Fernando Nevado, del Ikasa Madrid, que con diez goles trajo en jaque a la defensa del bloque de Santi Urdiales.
Al Caserío le toca recomponerse de esta clara derrota para afrontar bien la segunda jornada liguera, en la que se estrenará en casa. Será el próximo sábado, a las 20:30 horas en el Quijote Arena ante el BM Montequinto.