El movimiento feminista de Ciudad Real ha vuelto a la calle este viernes tras el éxito del 8 de marzo sin motivos para el optimismo. “Nos preocupan los recortes de las leyes que tienen que ver con los derechos de las mujeres y colectivos LGTBI. No se puede tolerar que nos llamen asesinas”. Lo dice Carmen Soánez, miembro de la Asamblea Feminismos Ciudad Real, que sin referirse a partidos, critica la proliferación “de mensajes tan fuertes e impactantes”, como matar niños o cortarles la cabeza, en esta precampaña electoral.
En su concentración mensual de los viernes, Feminismos ha hecho una defensa cerrada de la actual ley del aborto y se ha opuesto “a la propuesta de volver a los años sesenta y setenta cuando las únicas mujeres que podían interrumpir su embarazo eran las que tenían dinero para irse al extranjero”. “Es un retroceso tan peligroso que hay que tenerlo en cuenta a la hora de votar, no debemos dejar de luchar”, aporta otra miembro de la asamblea, en la concentración de esta tarde en la plaza del Pilar de Ciudad Real.
Más violencia y violaciones en grupo
Con trece mujeres asesinadas en lo que va de año (más que en 2017 por estas fechas), Feminismos denuncia cómo están calando en la sociedad, en especial entre los jóvenes, los mensajes contra las mujeres. “Sigue habiendo más violencia, incluso parece que se han puesto de moda las violaciones en grupo, no se puede consentir”.
Consideran que en vez de estar avanzando en educación y respeto, “vamos retrocediendo”, por lo que seguirán saliendo a la calle para seguir exigiendo educación, respecto y sentencias más justas, “¿qué mensaje le damos a los jóvenes si vemos que unos tíos violan en grupo a una mujer y están en la calle?”, se pregunta Soánez.