La provincia de Ciudad Real tan solo registró 45 matriculaciones de vehículos 100% eléctricos en 2019. Una cifra demasiado baja en comparación con otras provincias o regiones en las que la movilidad eléctrica está más presente en la sociedad. Este año, a pesar del parón de los meses de marzo y abril por la crisis del COVID-19, hasta el 30 de abril se habían matriculado un total de 30 vehículos eléctricos, un 76% más que en el mismo periodo del 2019, según los datos facilitados por FACONAUTO. Una cifra que pone de manifiesto que el interés por ‘lo eléctrico’ está despertando entre la población ciudarrealeña.
Los híbridos tienen una mayor implantación en la provincia. Según los datos de FACONAUTO, en todo 2019 se matricularon 449 vehículos híbridos en Ciudad Real, mientras que hasta el 30 de abril de 2020 se habían vendido 133 híbridos, casi un 5% más que en el mismo periodo del año anterior, aunque teniendo en cuenta que ha habido dos meses de completo parón.
Aunque los híbridos cuentan con una mejor venta, los vehículos de cero emisiones de CO2 o los que poseen la etiqueta ‘Eco’ de la DGT aún cuentan con poca implantación en la provincia. Por ello, los concesionarios esperan que el Plan Moves puesto en marcha por el Gobierno Central, ayude a que los vecinos de la provincia se decidan por la adquisición de estos vehículos.
El Plan Moves fija las cuantías de ayudas entre los 1.900 y los 5.500 euros, que dependen por un lado de la autonomía del automóvil y por otro de si se achatarra o no un coche usado. En el caso de los coches eléctricos con una autonomía igual o mayor a 90 kilómetros, que son la mayoría, se fija por ejemplo en 4.000 euros, pero pueden ascender a 5.500 euros si se achatarra un coche antiguo.
“Cualquier medida que apoye o incentive el mercado es buena. Además, si se incentiva la compra de vehículos eficientes, mejor todavía”, señala Francisco Carrión, gerente de Tresa Automoción, que gestiona las marcas automovilísticas Audi, Volkswagen y Toyota.
Carrión asegura que los híbridos se están comenzando a vender “bastante bien”, sobre todo en Toyota, que la gran mayoría de sus vehículos son híbridos y, por tanto, cuentan con la etiqueta ‘Eco’. El problema llega con los eléctricos, pues considera que los usuarios “aún tiene respeto” a las infraestructuras de recarga, aunque confía en que “poco a poco” ese respeto se vaya perdiendo, pues afirma que la movilidad eléctrica “no solo es el futuro, sino que ya es el presente”.
La limitación de los kilómetros es otro handicap que presenta este tipo de vehículos, aunque el gerente de Tresa Automoción considera “más que suficientes” los 300 kilómetros de autonomía que suelen tener estos vehículos. “Los usuarios no solemos hacer viajes de más de 300 kilómetros todos los meses y, además, esto irá cambiando según se vayan instalando por la geografía española supercargadores que carguen por completo los vehículos en cuestión de 15 minutos”, destaca.
Las Administraciones públicas y grandes empresas deberán apostar por ir instalando
Uno de los principales motivos por el que los usuarios aún no se decide a adquirir un vehículo eléctrico es por la escasez de infraestructura. Por ello, desde empresas como Comunitelia, que desarrolla soluciones para ‘Smart Cities’, esperan que en los próximos meses los ayuntamientos y las grandes empresas apuesten por instalar puntos de recarga de vehículos eléctricos en la vía pública o en aparcamientos de las empresas.
“Estamos en el proceso de prescripción para instalar puntos de recarga en diferentes localidades”, señala a Lanza Francisco Olmedo, responsable de Desarrollo y Producto de Comunitelia. Olmedo reconoce que, de momento, hay poca implantación de puntos de recarga, pero asegura que con el desarrollo del Plan Moves y su evolución permitirá que poco a poco se vaya estableciendo una red suficiente para poder moverse tranquilamente con un vehículo eléctrico.
La JCCM y la Diputación prevén instalar 50 puntos de recarga eléctrica en la provincia
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la Diputación Provincial de Ciudad Real pondrán a disposición de los ayuntamientos de la provincia más de seis millones de euros para la transición energética, de los que parte de ellos se destinarán a la creación de una red de puntos de recarga para vehículos eléctricos en la provincia de Ciudad Real con, aproximadamente, unos 50 puntos, que se instalarán a lo largo de 2020.