El Partido Popular de Ciudad Real afronta su derrota más “dura”, en palabras de su presidente Francisco Cañizares, en unas elecciones generales en la provincia, convencido de que pese a todo sigue siendo la única alternativa “a los gobiernos del PSOE y de la izquierda”.
El partido, que tras este 28 de abril, pasa de ser la fuerza hegemónica en Ciudad Real a perder cuatro parlamentarios, dos congresistas y dos senadores, encaja el golpe asumiendo que la división del “centroderecha” solo sirve para favorecer “un gobierno de Pedro Sánchez con aquellos que quieren romper España”.
Cañizares con los principales candidatos
El presidente provincial del PP, que ha dado la cara con principales cuadros al Congreso y al Senado, Rosa Romero, Juan Antonio Callejas, José Alberto-Martín Toledano y Carmen Quintanilla pasadas las doce de la noche, ha insistido en la idea de que “el PP es el único partido que puede parar al PSOE en Ciudad Real, Castilla-La Mancha y España”.
El PP se deja 52.000 votos
El PP, que desde 2008 mantenía tres diputados frente a los dos del PSOE en Ciudad Real, se ha dejado más de 52.000 votos en estas elecciones generales en la provincia. Su pinchazo ha servido para que Ciudadanos, y sobre todo Vox, la extrema derecha que irrumpe de la irrelevancia electoral, hayan roto por primera vez en la historia el bipartidismo en Ciudad Real.
El bloque de centro-derecha ha ganado
Rosa Romero, la única diputada electa del PP por Ciudad Real, ha valorado la “compleja campaña” electoral y el esfuerzo de su partido y la dirección nacional, ha felicitado al PSOE, y añadido la coletilla de que si suman los votos de PP, Ciudadanos y Vox, “el bloque de centro derecha ha ganado las elecciones”
La parlamentaria popular ha insistido en la idea, que ya lanzó Casado en campaña al decirle a Vox que no se presentará en las circunscripciones más pequeñas, “la fragmentación del bloque de centro de derecha iba a favorecer que Sánchez pudiera seguir en la Moncloa”.
Las elecciones municipales, otra historia
Tocados con este resultado, pero no hundidos por lo que han transmitido en los mensajes, el PP provincial considera que las elecciones municipales del mes que vienen serán otra historia. En ellas confían que vuelva la sensatez a su electorado. “Somos la primera fuerza política en la oposición y también la primera fuerza del bloque de centro-derecha”.