La U.D. Socuéllamos no ha tenido un comienzo de Liga demasiado regular, le está costando encadenar victorias consecutivas y no termina de anclarse a la zona de play off en sus posiciones más altas.
A pesar de que el balance defensivo está siendo muy bueno -se han encajado los mismos goles, 4, que el pasado año a estas alturas-, lo que está privando al equipo de sumar más puntos es el gol, bagaje sensiblemente menor que en las dos temporadas anteriores en Tercera, con 21 en la pasada y 17 en la anterior por los solo 12 de esta con 10 partidos disputados.
No obstante, apenas suma el conjunto de Manolo Martínez 3 puntos menos, 19, que el equipo de Mario Simón, que el pasado año arrasó en Liga rompiendo muchos registros, y 3 más que el de Manu Calleja, que solo en las jornadas finales cedió el liderato pero pese a ello quedó a segundos del ascenso. No parecen por tanto distancias insalvables ni nada por lo que preocuparse. Ya se sabe que la Liga es larga, todos los equipos pasan por baches, se sufren muchos vuelcos y cuando realmente se ventila lo decisivo es al final. Precedentes tenemos de todo tipo como para comenzar a quitar posibilidades de nada a nadie. El Villarrobledo en enero, por su particular situación, parecía un equipo desahuciado y ahí está ahora.
Dicho esto, no cabe duda, que independientemente de lo que pueda suceder después, los socuellaminos tienen ante sí tres partidos de una especial relevancia que irremediablemente van a marcar el rumbo al equipo. Cómo quede posicionado el conjunto azulón tras esta serie de encuentros será significativo, y hablará a las claras de las posibilidades reales en esta temporada donde las dudas no terminan de despejarse.
El primero de la serie será el C.D. Toledo en el Paquito Giménez. El conjunto de Manu Calleja es el actual segundo clasificado y máximo favorito al título. Pero hay equipos que han llegado para quedarse, como Quintanar del Rey o Atlético Ibañés, ambos ocupando por el momento el lugar de Conquense y Guadalajara.
Los de Manolo Martínez ya vencieron al Quintanar del Rey, cabe destacarlo, y el siguiente partido después del Toledo será en Casas Ibáñez para rendir visita al líder.
El último partido de la citada terna tendrá lugar el miércoles 13 de noviembre, pues se trata del dichoso aplazado de Torrijos, lo que servirá para ponerse por fin al día con el resto de equipos, cosa que también está lastrando a los azulones en la clasificación.
Máxima exigencia que puede dejar al Socuéllamos como nuevo líder si supera a sus rivales directos y suma los tres puntos del partido que arrastra de desventaja o por el contrario, alejarle de manera considerable de la cabeza y poner sobre la mesa motivos reales para la preocupación.