Comprar barato suele salir muy caro. Que se lo pregunten a un vecino de la provincia, M.F.C., que en diciembre de 2015 ‘compró’ en metálico por 28.500 euros un BMX X6 (valorado en no menos de 50.000) a un supuesto comercial de una empresa que no existía.
En realidad hizo un trato con un estafador profesional, José M.M., con nueve condenas firmes por distintos tipos de estafa, las cuatro últimas en la provincia de Bajadoz, que este martes ha reconocido esta nueva, en el polígono La Vega de Torralba, ante la sección primera de Audiencia de Ciudad Real.
12 años de prisión por las diez estafas
José M.M. se acogerá al artículo 76 del Código Penal que ante tal acumulación de condenas (diez con esta) por el mismo delito, permite una refundición de penas que conlleva cumplir una sola sentencia de prisión, por el triple de la condena firme más elevada. En este caso concreto doce años, según ha explicado el abogado Javier Pérez Rodilla, que le ha asistido por el turno de oficio.
La estafa: se largó con el dinero en la puerta del concesionario
El tribunal considera probado que José M.M., de 45 años y con otros antecedentes por delitos de robo, puso un anuncio en el portal Milanuncios.com: vendía un vehículo BMW X6 con 163.000 kilómetros por 28.500 de la entidad Funcar S.L. (una empresa inexistente). En la reseña aparecían dos números de teléfonos móviles.
En el concesario Manchacars
La víctima, M.F.C., vio el anuncio y llamó a uno de los teléfonos. Quedaron en verse en el concesionario Manchacars del polígono industrial La Vega de Torralba de Calatrava.
El acusado, que en realidad había dado dos números telefónicos que no eran suyos, contactó unos días antes con el concesionario de Torralba, y se interesó por un coche de las mismas características que el del anuncio. También dio un nombre falso y quedó con ver el vehículo y probarlo el 14 de diciembre de 2015.
El acusado llegó primero al concesionario el día de la cita, habló con el gerente y le contó que estaba esperando a su socio para probar entre los dos el vehículo. Cuando la víctima llegó, acompañado de un amigo, creyó que estaba haciendo un trato con el concesionario a través de este comercial (el acusado).
Se fue un momento “a la oficina”
El gerente de la empresa de coches de Torralba les facilitó las llaves, les esperó a la vuelta del trayecto de prueba, pero a instancia de J.M.M. dejó un momento a solas al acusado con el comprador y su amigo. En ese momento la víctima, convencido de que hacía un gran negocio, firmó un contrato de compraventa con Funcar S.L. y entregó un sobre con 28.500 euros en metálico al acusado que con la excusa de “ir un momento a la oficina”, se marchó de allí y los dejó a solas con el gerente que, ajeno a lo que ocurría, les explicó el valor real del coche y que no conocía de nada al acusado.
Al no estar acreditada la entrega de ningún dinero la víctima ni tan siquiera tiene derecho a ser indemnizado, en caso de que el acusado, en prisión en estos momentos, pudiera pagarle.