El Fogón de María es uno de los bares de tapas y raciones que visitan los puertollanenses para degustar su tradicional “bomba”, precisamente con esta tapa ha participado en el III Concurso de Tapas “Yo soy tapeador”, pero fuera de este concurso El Fogón de María cuenta con diferente “bombas” a lo largo del año, servidas como tapas con su consumición.
Una bomba de pollo, queso, plátano y nueces con una salsa de petitoria. Todo en un vaso donde la salsa de petitoria va en el fondo, después lleva una pequeña galletita y arriba la “bomba” para poder mojarla en la petitoria o no, según el gusto del cliente. Estas “bombas” son una especie de croquetas totalmente artesanas que han sido degustadas por cientos de clientes en este III Concurso de Tapas.
Es la tapa estrella del “Fogón de María” que puede ir servida a base de bacalao y gambas, de chorizo y otras variedades; todas ellas como una tapa que este establecimiento ofrece a diario.
Además, al margen de esta “bomba”, cuentan con una gran variedad de tapas, una de las aficiones de los puertollanenses, que pasan por montaditos de todo tipo –jamón, bacon o tortilla de patata a la plancha- y además los fines de semana cuentan con tapas de migas, gachas o arroces, “algunos sábados hacemos paella, otras arroz negro o arroz al horno, lo que nos va pidiendo la gente, preguntamos qué les apetece y así hacemos”, señala Isabel Medina, propietaria de El Fogón de María.
“El Fogón de María” ofrece también a sus clientes una amplia variedad de raciones. Las más demandadas son presa, solomillo, ensalada templada de langostinos y pulpo o los típicos calamares, puntillitas o sepia, por citar algunas. Además tostas de pollo en escabeche, de foie, de jamón y queso o boloñesas.
Cuatro años lleva “El Fogón de María” abierto tras estar siete años en la Plaza María Auxiliadora regentando un restaurante. Precisamente en el centro de Puertollano sigue afianzando su clientela.