Ese año de pandemia en el que se cumple su tercera edición del Premio Café Español ha roto fronteras y pulverizado cifras de participación al haber concurrido 160 escritores llegados de lugares como Australia, Israel y Argentina, además de distintos puntos de la provincia y de la geografía nacional aunque Andalucía, Madrid y el País Vasco encabezan la procedencia de los relatos participantes en esta edición.
El jurado, presidido por el Premio Nacional de Literatura, Alfredo Conde, y del que también forma parte del escritor de Calzada de Calatrava, Pedro A. González Moreno, entre otros, dará a conocer hoy el mejor relato de entre el importante número de propuestas recibidas. “Hemos roto fronteras”, decía hace unos días el periodistas ciudarrealeño, Aurelio Romero, miembro del grupo promotor y coordinador del Premio Café Español. “El Premio Café Español es una temeridad, una pequeña historia de ambiciones posibles”, aseguraba en una entrevista con este digital.
Conquista literaria en castellano
En la misma manifestaba su satisfacción el número de participantes asegurando que “la satisfacción es un alimento del ego que no deja ver un horizonte mejor. Pero sí, 160 relatos cortos es una conquista literaria en castellano por la calidad de las obras, por la novedad de cómo se difunden y por la diversidad de los países de procedencia”.
El objetivo de los promotores de este este premio literario, que se distingue por el uso de internet para difundir los relatos, ha ido lanzar un premio limpio, en un mundo donde el apoyo económico viene de mil sitios diferentes, incluso de algunos que tiñen el resultado, según explicaba Romero.
“Y, de otra parte, -asegura- que la obra y sus autores no quedasen en el cajón una vez que se elija el relato ganador. Hay muchas causas que impiden que una buena obra sea conocida por sí misma. Y eso lleva a que esa obra vaya de concurso en concurso mendigando un premio pequeño pero que le haga salir del anonimato. Esto es así. Con el Premio Café Español apostamos porque se lea la obra y se conozca a quien la escribe”, sostuvo.
300 euros y trofeo
El periodista Javier Valenzuela fue el ganador de la segunda edición del Premio Café Español que está dotado con 300 euros y trofeo. Cualquiera de esos relatos valdría infinitamente más, no es una manera de hablar, explica Romero.
A su juicio, la valentía de escribir, competir y recibir 300 euros y un cuadro, en el caso de que ganes, es un acto de generosidad con uno mismo y con la cultura. “El trofeo y la dotación económica es un agradecimiento material. Dudo de que se haya participado por el aspecto económico. Hemos conseguido credibilidad y se valora el esfuerzo de comunicación, la ayuda a quienes escriben y compiten”.