A.C.S., de nacionalidad española, aceptó esta mañana ante la Sección Primera de la Audiencia Provincial que en mayo del año 2010 intentó hacerse con un paquete de alrededor de 1,5 kilos de cocaína que llegaron a la capital mediante un servicio de paquetería procedentes del aeropuerto de Barajas en Madrid. Por estos hechos el tribunal le va a condenar a dos años y medio de prisión (seis meses menos de lo que pedía la fiscalía) como autor de un delito contra la salud pública en grado de tentativa (no llegó a hacerse con la droga).
El acuerdo, que evitó el juicio, abre la posibilidad al condenado de no ingresar en la cárcel, solicitud que una vez que la sentencia sea firme tramitará su abogada del turno de oficio, María Isabel Alemany, “creemos que no tiene por qué ingresar en prisión”, explicó.
Los hechos se remontan a la primavera del año 2010. A primeros de mes la Unidad de Riesgo del aeropuerto de Barajas detectó en su almacén de depósito temporal del recinto aduanero la existencia de un envío sospechoso: un paquete de ocho kilos de peso que una vez examinado incluso con rayos X presentaba una densidad que por su forma “indicaba que podría tratarse de sustancias estupefacientes”, lo que según el escrito de calificación de la fiscalía determinó que la unidad procediera a abrir el paquete. En su interior apareció un mochila con una lámina de una sustancia de color blanco que al aplicarle el narcotest dio positivo en cocaína.
A partir de ahí un juzgado de Madrid autorizó la circulación y entrega vigilada del paquete en el que figuraba como remitente un tal V.P.M. (las actuaciones contra esta personas se sobreseyeron).
El paquete siguió su camino y llegó hasta Ciudad Real, en concreto a las dependencias de una empresa de paquetería. Por ese paquete se interesó los días 30 de abril, 3,4 y 5 mayo el acusado.
El 13 de mayo la mochila se abrió en presencia policial previa autorización policial y se acusó del delito de tráfico de drogas en grado de tentativa al acusado, que ayer se declaró culpable.
La policía comprobó que dentro había alrededor 1,5 kilos de cocaína distriduidos en diferentes paquetes.