A unos se les dará mejor que a otros, habrá incluso quienes posiblemente se dediquen en el futuro al arte, pero para el Ayuntamiento todos los niños son “los que más pintan” porque son “el futuro de la ciudad”, destacó este jueves el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, quien participó en la entrega de diplomas a la veintena de chavales, de entre seis y quince años, que han completado el XIII Curso Infantil y Juvenil de Pintura Manuel López-Villaseñor.
Celebrada la entrega de reconocimientos en el Museo Elisa Cendrero, Cañizares valoró el alcance de actividades de este tipo en las que los chavales incorporan a su bagaje personal conceptos que les van a ser muy útiles para comunicarse y apreciar la vida y mundo. Cultivar a personas “con sensibilidad, capacidad de comunicarse y aprender cosas nuevas”, que sepan transmitir sentimientos a través del arte como máxima expresión del ser humano es fundamental para la ciudad ya que “les hace mejores personas y ciudadanos”.
Le acompañó la concejal de Promoción Económica, Yolanda Torres, así como el de Cultura, Pedro Lozano, quien valoró cómo zambullirse en la pintura en este período estival de ocio anima a los chavales a parar, reflexionar, saborear la existencia y plantearse la realidad y el entorno a través del arte.
Los ediles del PSOE, Pilar Zamora y Antonio Gallego, también felicitaron a los veinte alumnos, desde primer ciclo de Primaria hasta la ESO, del curso que, impartido por Jesús Arévalo Lorido, comenzó el pasado día 3 y culmina este viernes 28 de julio.
Dividido en dos bloques quincenales por edades, han trabajado las técnicas de acrílico y acuarela, practicando la carta de colores, cómo tienen que mezclar y qué tipos de efectos y texturas se pueden conseguir en, entre otras temáticas, bodegones, paisajes, marinas y puestas de sol.
