Este jueves, 1 de febrero, Lanza y Renta 4 han reconocido a los ganadores de la XIV Edición de su concurso de bolsa, en el que se han superado los 150 participantes, tanto de Ciudad Real como de fuera de la provincia.
Cada uno de ellos ha dispuesto de 60.000 euros ficticios, con los que han podido ejecutar tantas operaciones bursátiles como han considerado oportunas para conseguir la máxima rentabilidad posible, atendiendo siempre a los valores reales de la bolsa IBEX-35 y del Mercado Continuo Español.
Premios
El ganador de esta XIV Edición del concurso, César González, profesor de Geografía e Historia, ha recibido como premio una paleta ibérica de bellota, productos de merchandising, un bono descuento de 50 euros para operar en bolsa y/o derivados y un diploma acreditativo.
El segundo clasificado, Daniel Díez, estudiante universitario, se ha hecho merecedor de un lomo ibérico de bellota, productos de merchandising, un bono descuento de 25 euros para operar en bolsa y/o derivados y un diploma acreditativo. En su caso, ha facturado operaciones con una rentabilidad del 3,86%.
Finalmente, la tercera clasificada ha sido Sonia Tortosa, periodista, que ha fijado operaciones con una rentabilidad del 3,79%. En su caso ha recibido un lote de botellas de vino, productos de merchandising, un bono descuento de 10 euros para operar en bolsa y/o derivados y un diploma acreditativo.
Concurso consolidado
Después de catorce ediciones, el concurso de bolsa de Renta 4 se ha consolidado en el tiempo, siendo referente para centros educativos, la Universidad de Castilla-La Mancha y para clientes de la entidad, que cada año espera que se abra el plazo de inscripción para jugar a ser auténtico ‘brokers’ de la Bolsa.
Desde la entidad apuntan que “este año las dos semanas en la que se tenían que ejecutar las operaciones ficticias, han coincidido con una estabilidad de la Bolsa que ha permitido cerrar operaciones con una rentabilidad, gracias a operaciones ‘seguras'”.
Habitualmente los ganadores se mueven en la franja de la casualidad. “Al ser dinero ficticio, muchos de los participantes cierran operaciones muy complejas en las que se puede conseguir la máxima rentabilidad o el mayor descalabro posible. Son movimientos extremos en los que lo importante es aprender y disfrutar de este mundo bursátil tan complejo, que con dinero real no permite estas apuestas tan a lo loco”.