El Ayuntamiento de Daimiel aprobó anoche el expediente de contratación que habilitará la prestación del servicio de Ayuda a Domicilio para los próximos dos años con un presupuesto base de licitación de algo más de 2 millones de euros, con posibilidad de dos prórrogas anuales por similar importe. En este expediente queda recogido que, si la adjudicación la gana una empresa diferente a la actual, la nueva empresa está obligada a subrogar a todas las trabajadoras en las condiciones salariales que marca el convenio colectivo de este sector.
El concejal de Hacienda, Jesús David Sánchez de Pablo, valoraba que este blindaje supone una garantía para las 54 trabajadoras que ahora mismo desarrollan este servicio en Daimiel. Algo que también beneficia a los usuarios, personas mayores y grandes dependientes, por la confianza que ya tienen con estas empleadas de Ayuda a Domicilio. Sánchez de Pablo destacaba además que el aumento con respecto al pliego anterior lo asumirá, en este momento, el Ayuntamiento de Daimiel, al mantener para este ejercicio en ordenanzas fiscales el precio para los usuarios.
Un nuevo ejemplo, en opinión de Sánchez de Pablo, del esfuerzo que realiza el Consistorio en una competencia de la Junta de Comunidades es que, un año más ésta “no aporta más dinero” a pesar de las últimas subidas del salario mínimo interprofesional, y, por tanto, del precio por hora del convenio colectivo sectorial, y, además paga “con retrasos” los convenios en esta materia. “Los ayuntamientos cada vez pagamos un poquito más y esto es insostenible. De momento, en 2020, el Ayuntamiento de Daimiel ha puesto más de un millón de euros y todavía puede que sea algo más. Seguiremos priorizando lo social, como vimos en los presupuestos que se acaban de aprobar, pero o se frena esto o es difícil pensar en el futuro de los Servicios Sociales tal y como está planteado en estos momentos”, reflexionaba.
Durante el debate, el portavoz de Izquierda Unida fijó su posición en contra de este expediente porque, entiende, que podría prestarse desde una gestión pública para que “el beneficio empresarial se pueda repartir en mejores salarios a las trabajadoras”. Galo Sánchez-Bermejo no compartía el “axioma de que lo público sea más caro”, y ponía ejemplos de ayuntamientos como “Irún o Jerez de la Frontera” que, según apuntó, han apostado por remunicipalizar estos servicios. “Requiere complicarse un poco más y trabajar”, añadía.
Un argumento rechazado por el equipo de Gobierno y también por el PSOE. Su portavoz en este debate, Miguel Rodríguez, defendió la gestión privada de este servicio porque en Daimiel “ha funcionado bien” desde su puesta en marcha. Rodríguez, que también estaba de acuerdo con la atribución que se ha delegado en la Junta de Gobierno Local para agilizar los trámites administrativos de la adjudicación, entendía que plantearse una gestión pública con la misma cantidad de dinero no sería suficiente para atender las necesidades de los daimieleños. “Nos quedaríamos cortos”, dijo. Asimismo, también subrayó que “la empresa privada asume las perdidas, en caso de producirse, y a los trabajadores se les está dando una garantía”.
Sin embargo, a pesar de compartir buena parte de las reflexiones del concejal de Hacienda y “el fondo” del expediente, el Grupo Municipal Socialista se abstuvo en la votación. Sánchez de Pablo también contestó al planteamiento introducido por el portavoz de Izquierda Unida, y concretó cuánto dinero supondría que el Ayuntamiento asumiera la gestión directa del servicio de Ayuda a Domicilio: “entre 500 y 750 mil euros”, en base al convenio colectivo del Ayuntamiento de Daimiel. La disyuntiva, a su juicio, no es entre “ansia privatizadora” y gestión pública, la clave es “ahorrar dinero a los daimieleños”.
El portavoz popular aprovechó su segundo turno para reconocer el trabajo de las profesionales durante la pandemia, mensaje al que se unió el alcalde, Leopoldo Sierra, haciéndolo extensivo a la empresa adjudicataria SAC-España. Sierra valoró su sacrificio y los gastos extra, como epis y demás material de protección que ha asumido, y sobre todo que “no haya roto el contrato”, a pesar de las subidas del salario mínimo profesional tras su firma. Un agradecimiento por “ellos, por las trabajadoras y por los cuidadores”.
El pleno se completó con varias preguntas acerca del servicio de limpieza por parte de ambos grupos de la oposición y con la confirmación de que la vacunación a los daimieleños entre 56 y 65 años se realizará a partir de la semana que viene en el CEDT, según le han trasladado desde la coordinación de enfermería de este centro al propio alcalde.
Sobre las propuestas de sanción realizadas por la Policía Local por incumplimientos de las medidas sanitarias, Sánchez de Pablo señaló que la mayoría han tenido que ver “con saltarse el toque de queda”, y aprovechó la respuesta a la pregunta de Galo Sánchez-Bermejo para destacar el “esfuerzo adicional” de los hosteleros durante la Semana Santa que ha ayudado a evitar situaciones de descontrol como las vividas en Navidad.
