La familia de doce miembros sorprendida en una finca de Almadén por la espectacular crecida del río Valdeazogues la madrugada del Viernes Santo, ha optado por permanecer en la vivienda bajo su responsabilidad, y desoír los consejos del personal de emergencias, Guardia Civil, Bomberos y Servicio de Emergencias de Castilla-La Mancha 112, que acudieron a rescatarlos al mediodía del viernes.

Los equipos de emergencia activaron al Grupo de Rescate Subacuático (Geras) de la agrupación de voluntarios de Protección Civil de Ciudad Real que llevaron su lancha para evacuar a toda la familia, seis adultos y seis niños, pero ha sido innecesario, “el caudal empezó a bajar y decidieron quedarse ahí, aunque nosotros no hemos llegado a hablar con ellos”, ha contado a Lanza el jefe de la agrupación, Alfonso Blanco.

Las lluvias sin tregua de la madrugada y las primeras horas del Viernes Santo en la comarca de Almadén dejaron aislada en su finca del paraje el Molino de los Ferrera a esta familia. El grupo está pasando la Semana Santa en su casa de campo y se sienten seguros en ella y con víveres suficientes, pese las crecidas de ríos y arroyos en la zona.