La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará la semana que viene el primer caso de violación a un hombre (un chico de 18 años recién cumplidos cuando denunció), que acusa a otro de menos de 25 años de haberlo agredido sexualmente en la Feria de Tomelloso de 2016.
El acusado, M.T.T., sin antecedentes penales, se enfrenta a ocho años de cárcel como presunto autor de un delito de agresión sexual con acceso carnal de los artículos 178 y 179 del Código Penal.
La fiscalía provincial también reclama 6.000 euros por daños morales y una orden de alejamiento respecto del acusado, la presunta víctima y la madre del muchacho a una distancia inferior a 300 metros, con prohibición de comunicación durante diez años.
Un video de la presunta agresión
La prueba de cargo del caso, que se juzgará el próximo 28 de junio, es un video en el que según el abogado que defiende al acusado, Eduardo García de León, se ve a dos adultos manteniendo relaciones sexuales. “El video será objeto de exhaustivo estudio por parte de especialistas en lenguaje no verbal para determinar si la relación fue o no consentida. Nosotros mantenemos que sí, no hay una sola señal ni lesión que demuestre la agresión”, mantiene el letrado.
La víctima se subió a su coche
La fiscalía considera probado que el 29 de agosto de 2016, a las siete de la mañana, el acusado circulaba con su vehículo por Tomelloso a la altura del auditorio López Torres cuando vio a su presunta víctima, que accedió a subir voluntariamente al coche para indicarle cómo ir hasta el bar Eclipse. Pero una vez allí M.T.T. no paró, siguió conduciendo hasta un camino apartado en que obligó al chico a hacerle una felación (la víctima creía que llevaba una pistola).
Lo más extraño del relato que considera probado la fiscalía es que el presunto violador detuvo la agresión para hacer un recado: llevó a su hermana a su trabajo al lado del centro de salud del barrio de San Juan, con la víctima en el vehículo pero atemorizada. A continuación se volvió a dirigir al camino Hoya de la Ruda en el que habían estado antes para continuar agrediéndole.
“Chupa y mira a la cámara”
La fiscal del caso también considera probado que M.T.T. grabó dos videos de la presunta agresión mientras le decía a la víctima: “Chupa y mira a la cámara”.
Al final dejó al muchacho cerca de su casa y le advirtió de que si contaba lo ocurrido lo mataría a él y a su madre, pero el joven denunció y el acusado fue detenido y encarcelado un día después.
M.T.T. ha pasado cuatro meses en prisión preventiva por estos hechos. En la actualidad está en libertad en espera del juicio que celebrará la sección primera de la Audiencia.