Raúl Fernández
Ciudad Real
Movistar Inter se coronó en el Quijote Arena campeón de la Copa de España 2017, revalidando así el título, su décimo en la historia. Para lograrlo tuvo que ganar en la tanda de penaltis a ElPozo, un rival que se empleó a fondo y que, en muchos momentos, dio mejores sensaciones. El empate a cuatro dejó a las claras la igualdad existente en una final que fue de menos a más, con un inicio pobre de juego que fue mejorando con los minutos, hasta alcanzar el clímax en una gran segunda parte, llena de tensión, de ritmo, polémica y muchos goles. Para más emoción, hubo el regalo de la prórroga y luego una tanda de penaltis inacabable, con hasta 18. La lotería cayó en un Movistar Inter que se llevó la alegría ante la decepción de los murcianos.
Fue ElPozo Murcia el que comenzó con más energía ofensiva desde el pitido inicial de los colegiados ciudarrealeños Carlos Rodrigo Miguel y Fermín Sánchez Molina. Raúl Campos rozó el palo en un mano a mano con Jesús Herrero y poco después Cardinal, tras una gran acción individual, sí que se topó con la cepa del poste en otro serio aviso.
Los murcianos ejercieron una intensa presión a un Movistar Inter nuevamente incómodo sobre la pista del Quijote Arena y que ni con los fabulosos regates de Ricardinho podía romper la defensa rival en el juego, aunque a balón parado Gadeia se sacó un durísimo disparo que se estrelló en el larguero. Seguía el 0-0 en el marcador, con 1-1 en lanzamientos a los palos y también empate a piques, los que se vieron casi desde el primer minuto entre los jugadores. El más perjudicado fue ElPozo, que se encontró con su quinta falta a 8:51 para el descanso, aunque su rival le siguió poco después: la quinta a 6:37.
Con más precauciones defensivas a la hora de meter la pierna en ambos, las ocasiones volvieron a llegar. Fernando firmó una gran acción para ElPozo que salvó Herrero. Perdonaron los murcianos, y eso lo pagaron, porque el Inter no lo hizo. Ricardinho robó un balón y se lanzó con una velocidad endiablada hacia la meta contraria para ver a la izquierda a Daniel. El brasileño algo escorado, inventó una vaselina que superó Fabio y que se convirtió en el 0-1 para los azules.
La final, al fin, tenía ya su primer gol y eso pareció abrir el partido, más todavía cuando ElPozo empató un minuto después con un saque de esquina que remató Álex en el segundo palo.
El partido mejoró claramente desde entonces, con mayor ímpetu de los rojillos, cuya acción sensacional de Alex por la derecha no encontró un rematador franco, cuando la jugada realmente lo mereció. El guión entonces se repitió: fallo en la definición de los murcianos y gol del Inter. Ricardinho, también el más listo de la pista, sacó con rapidez un saque de banda y Rafael, ante el despiste defensivo rival, anotó el 1-2.
Y justo antes del descanso el Inter pudo hacer más sangre, pero Taffy, solo en el segundo palo, envió alto una gran ocasión con la que terminó un primer tiempo que se animó claramente en los minutos finales.
ElPozo encontró el empate muy pronto, al minuto de la segunda parte. Y lo hizo un protagonista imprevisto, Ricardinho, que introdujo el balón en su portería tras un centro de Fernando. Las tablas volvían al electrónico y, afortunadamente, el juego siguió animado, un toma y daca con momentos de tensión. Buen fútbol sala.
Y los de Murcia se colocaron por primera vez por delante. Alex sacó una falta a la frontal del área en donde Cardinal recibió solo y de media vuelta anotó el 2-3.
Nada más sacar de centro pudo ampliar la ventaja Marinovic y en el rebote del portero llegó el lío con una trifulca entre Miguelín y Rafael. El árbitro ciudarrealeño Fermín lo solucionó con amarilla a cada uno, aunque pareció una clara agresión de el de ElPozo.
El partido terminó ya de calentarse. Quemaba la pista azul. Y más con el empate de Rafael en otra acción de estrategia. Ahora sí, llegó fútbol sala total, con dos equipos lanzados definitivamente a por el triunfo. Y en ese ida y vuelta volvió a ponerse por delante ElPozo, gracias a Andresito que culminó una contra bien llevada por Pito.
No había tregua. ElPozo cometió la quinta falta y pocos segundos después, otra más, la sexta y doble penalti. Ricardinho no falló para volver a empatar, ahora a cuatro.
El Movistar Inter llegó más entero a los minutos finales y rozó el gol más que el rival, aunque Alex, a falta de segundos, tuvo una clarísima para haber dado el triunfo a los rojillos. No hubo goles y tocaba prórroga.
La primera parte del tiempo extra apenas tuvo nada, con dos equipos más dispuestos a evitar goles rivales que a crear en ataque. Y la segunda sí tuvo, un doble penalti para el Inter a falta de 47 segundos. Ricardinho, esta vez, sí falló. Quedó tiempo para que Herrero sacara un balón a Miguelín y para una posible falta a favor de ElPozo que no se pitó. Los penaltis decidirían la final y fue una tanda que pareció inacabable y que terminó coronando al Inter.
Ficha técnica, en la edición impresa