Según han informado fuentes del parque nacional, la ampliación de estos horarios se realizada con el objetivo de atender lo mejor posible a los visitantes que quieran conocer y adentrarse en este espacio protegido.
Además de los centros de visitantes y las rutas, también se amplía el horario de los museos y de los puntos de información.
Estas mismas fuentes han apuntado que tras un final de invierno de intensas lluvias, el Parque Nacional de Cabañeros recibe la primavera con los ríos y arroyos a pleno caudal.
Además, durante estos días se puede apreciar el rebrote de árboles y arbustos, los primeros mantos de flores y la llegada de aves migratorias estivales como las cigüeñas.
El parque nacional ha animado a las personas interesas en disfrutar de este espacio natural a visitarlo durante estos días, si bien, han señalado que para concertar las visitas guiadas es imprescindible concertarla previamente.
Cabañeros logró en 2017 un registro histórico en cuanto al número de visitas al alcanzar los 112.670 visitantes, 8.100 más que el año anterior.
En la actualidad, este espacio protegido ofrece un servicio guiado gratuito para rutas de senderismo en el Boquerón del Estena, el Chorro, Gargantilla, La Viñuela y puntualmente en la Plaza de los Moros.
Visitas guiadas
Otra modalidad que ofrece son las visitas guiadas, que se pueden hacer en vehículos 4×4 y son realizadas por la empresa concesionaria autorizada con salidas desde Casa Palillos, Alcoba, Horcajo de los Montes y Retuerta del Bullaque.
El Parque Nacional de Cabañeros ha conservado un importante legado natural donde viven ahora tres especies consideradas en peligro de extinción, como el águila imperial, la cigüeña negra y el jarabugo.
Además, en él encuentran cobijo seis especies consideradas vulnerables, como el aguilucho cenizo, el milano real, el alimoche común, el nóctulo común, el murciélago grande de herradura y el buitre negro.
Asimismo, hay otras 173 especies incluidas en la categoría de interés especial en este espacio natural.
Entre sus valores ambientales destaca el conservar una representación de sistemas naturales singulares y elementos geológicos de interés, así como originales bosques de vegetación con presencia de quejigares y melojares, encinares, carrascales, alcornocales y acebuchales.
