El grupo municipal de Ciudadanos ha sido el último en hablar de esta ruptura de las negociaciones de la moción de censura, si bien también ha sido el que menos se ha nombrado en las ruedas de prensa de los otros grupos políticos.
Ciudadanos ha sido el único que calificado de “fracaso” esta negociación y asume que esta moción tenía “todo el apoyo de la ciudadanía de Puertollano porque se producía en un momento importante”.
“Para nosotros es una pena, un fracaso que no haya salido adelante” y espera que haya un antes y un después de la misma.
Rafael López explicaba que ha habido dos motivos para esta ruptura, uno de ellos que “ha prevalecido las infraestructuras de partido e injerencias externas” y en segundo lugar “ha sido más importante el quién que el qué”.
López destacaba que desde su partido no se ha había dado a los concejales puertollanenses ninguna consigna ni directriz que seguir, conscientes de que se trataba de una decisión a nivel local, “esto es la nueva política”.
Desde Ciudadanos reconocen que no habían pedido la alcaldía en ningún momento -al ser el grupo minoritario- pero también afirman que nunca se habían negado a asumirla si fuera necesario. “Tenemos la conciencia tranquila porque no hemos podido hacer más”, esgrime este grupo político, aunque considera que no se trata de un punto y final porque seguirán trabajando con la oposición para llegar a acuerdos ya que “la época de la mano tendida al equipo de gobierno se acabó y ahora se tiende hacia la oposición”.
López explicaba que uno de los acuerdos era que quien ostentase la alcaldía debía tener a su lado a un concejal de cada uno de los grupos y que había que “airear” el Ayuntamiento de Puertollano.
En todo esta asunto, Rafael López entiende que “quien sale debilitado es Puertollano”