J. C. Chinchilla
Ciudad Real
Josefina Montero Sánchez, enfermera de la Unidad de tratamiento especializado de tabaquismo del hospital La Mancha Centro de Alcázar de San Juan, explica que un estado de ánimo bajo es una de las principales causas que provocan que numerosos fumadores abandonen los programas de deshabituación tabáquica que inician en los centros sanitarios.
En el trabajo ‘Factores asociados al abandono del tratamiento en un programa multicomponente de tabaquismo’, que ha ganado el primer premio de investigación del Colegio de Enfermería de Ciudad Real, Montero analiza las causas que hacen que los fumadores abandonen tras la primera o segunda visita a la unidad el programa de deshabituación tabáquica que inician en el hospital La Mancha Centro.
En su estudio, subraya que, sobre todo, el abandono prematuro se debe a factores de corte psicológico asociados a estados de ánimo negativos, o estados afectivos negativos, así como problemas de ansiedad, nerviosismo o dificultad para concentrarse.
Igualmente indica que el fumador que consume más de 23 cigarrillos al día tiene una tasa de adherencia más baja al programa de deshabituación.
Adherencia
Ante esta situación, Montero propone emprender medidas que mejoren la adherencia, “porque eso lógicamente repercutiría directamente en las tasas de éxito de los fumadores que finalmente abandonan este hábito”.
En el hospital alcazareño la tasa de éxito al alta del paciente, que suele ser aproximadamente a los dos meses de iniciar el programa, es de un 56 por ciento. Después, según los seguimientos que realiza la unidad, a los seis meses esta tasa se reduce al 50 por ciento y a los doce meses, cuando ya oficialmente se puede considerar al paciente exfumador, es del 21,8 por ciento.
Montero considera adecuado en su trabajo establecer un perfil de riesgo de fumadores con baja adherencia al tratamiento, “de forma que podemos hacer una detección e incrementar estrategias de tipo motivacional, de soporte psicológico o conductual, o estrategias de resolución de problemas para motivarles a mantenerse más tiempo con nosotros en el programa de deshabituación”.
Igualmente, la enfermera plantea otras opciones, como puede ser, en lugar del abandono brusco del consumo como se recomienda desde la unidad, realizar una reducción progresiva del consumo en el periodo de riesgo de abandono y, al mismo tiempo, poner en marcha estrategias de motivación para alcanzar su objetivo final: dejar el tabaco.
La Unidad de tratamiento especializado de tabaquismo del hospital La Mancha Centro atiende a una media de 22 pacientes nuevos al mes.