Un grupo de alumnos, estudiantes de Primaria, del colegio Ángel Andrade de Ciudad Real han participado este viernes, en el marco de las actividades conmemorativas del Día del Libro, en una interesante charla que ha impartido la profesora de la Facultad de Educación, Esther Nieto, en la que ha subrayado el importante papel que juegan las nuevas tecnologías en el aprendizaje pero incidiendo en que no todos los usos tecnológicos son buenos y en la necesidad, también, de poner límites.
“Los mejores resultados para el aprendizaje, y para un buen uso de las nuevas tecnologías, deben limitarse en el tiempo”, ha indicado la también directora del proyecto de investigación LINGTEC quien ha destacado que el uso moderado de las tecnologías es la clave para poder obtener su máxima utilidad.
Contraria al uso del móvil en edades tempranas
En esta línea, y en declaraciones previas a la charla impartida en el centro educativo, Nieto ha puesto de manifiesto que tanto las familias como los niños, “estamos bombardeados por las nuevas tecnologías y, también, por adquirir el mejor y el último dispositivo, siendo víctimas de ese comercio y promoviendo el uso de móviles, por ejemplo, a edades muy tempranas”.
Un ejemplo muy gráfico de la importancia de poner límites, ha indicado, es el del propio genio de la informática, Bill Gates, que les dio el móvil a sus hijos a los 14 años. “No es bueno empezar tempranamente con un dispositivo porque se pueden generar adicciones y, además, los niños no disponen de las herramientas sociales suficientes”, ha añadido.
Limitar, moderar y retrasar el uso del teléfono móvil
“Tener un móvil no va a contribuir a nada positivo a edades tempranas hay que limitar, hay que moderar y hay que retrasar el uso de dispositivos móviles, así lo avalan informes de Unicef y de la OCDE en el que, también, se pone de manifiesto que aquellos centros educativos que no usan la tecnología tienen resultados bajos, igual que los que las usan muchísimo, los resultados buenos vienen asociados a un uso moderado y con mucho sentido”, ha indicado Nieto.
Charlas enmarcadas en un proyecto de divulgación científica
La profesora de la Facultad de Educación, Esther Nieto, ha explicado que la charla de este viernes en el colegio Ángel Andrade está inscrita en un proyecto de divulgación científica promovido por la Unidad de Cultura Científica e Innovación de la Universidad de Castilla-La Mancha y, también, de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología.
Denominado LINGTEC, Lingüística y Tecnología Aplicada, Nieto, que es su directora, explica que el objetivo principal del proyecto es divulgar resultados de investigaciones en esa intersección entre el aprendizaje, la lingüística y las nuevas tecnologías.
El poder de las palabras
“Somos un equipo de profesores muy interdisciplinar que pertenecemos a distintas áreas como la lingüística, el aprendizaje de lenguas, la sicología o la informática. Lo que pretendemos es crear espacios de reflexión acerca del poder de las palabras en los medios de comunicación social, combatir esta polarización que estamos viendo en las redes sociales, acabar con el lenguaje del odio, desmontar estereotipos de toda clase, incluidos los de género, intentar despertar la evaluación crítica de los usuarios ante la gran cantidad de información a la que estamos expuestos y que, también, sepamos valorar esa información que consumimos y también producimos”, ha explicado.
Seis grupos de investigación
Las charlas en los colegios, impartidas por los seis grupos de investigación implicados en este proyecto, van fundamentalmente dirigidas a estudiantes de educación Primaria y Secundaria. “También tenemos en el proyecto otros colectivos, como familias y futuros profesores, pero principalmente estamos desarrollándolo con estudiantes; no queremos que la divulgación se ciña solo al ámbito universitario o a las revistas especializadas sino queremos compartirlo también con la sociedad y aportarle el conocimiento”.
Más de 400 alumnos hasta la fecha
Hasta el momento, explica Esther Nieto, ya han visitado ocho centros escolares con la asistencia de más de 400 alumnos en las provincias de Toledo y Ciudad Real. En concreto, en Ciudad Real, ya han participado en este proyecto el colegio Luis Vives de Piedrabuena, el centro María Elena Maseras de Miguelturra y, en la capital, el Ferroviario, Ángel Andrade, este viernes, y la semana que viene acudirán al Carlos Eraña . “A lo largo de desarrollo del proyecto, cuya duración oficial es hasta el 30 de septiembre, tenemos pensado llegar a cerca de 1.500 estudiantes, también en Albacete y Cuenca”, ha concluido Nieto.
