José Antonio Román, coordinador del censo y miembro de esta asociación, ha explicado que los datos revelan que esta cifra es la segunda más alta obtenida hasta la fecha en un censo para la especie, sólo superada por los datos obtenidos en enero de 2017, fecha en la que contabilizaron algo más de 260.000 ejemplares.
El coordinador el censo ha apuntado que España vuelve a convertirse en el principal destino de las cerca de 400.000 grullas que se estima pueblan el occidente europeo y cuya mayor parte viaja hasta España para pasar el invierno.
Ha recordado que las grullas eligen España para invernar tras recorrer más de 4.000 kilómetros de distancia, porque en nuestro país encuentran amplias zonas que le proporcionan el alimento que en sus países de origen no encuentran en esta época del año y que las grandes dehesas y los amplios arrozales y maizales son algunos de los lugares que aprovechan para alimentarse.
Román ha destacado que, por comunidades autónomas, el censo en España arroja que Extremadura, con 133.685 ejemplares, es la comunidad que más cobijo ofrece a estas aves.
Extremadura ha batido este año el récord de grullas invernantes con más de 3.000 ejemplares nuevos con respecto al censo del año pasado y Castilla-La Mancha es la segunda comunidad en importancia para la invernada, con 51.775 ejemplares, aunque en esta región han quedado algunas zonas importantes sin poder ser censadas, como es el caso del Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Morena, donde se sabe que invernan algunos cientos de ejemplares.
La comunidad autónoma de Aragón vuelve a acoger este año un número significativo de ejemplares, en total 49.032, después de que la laguna de Gallocanta haya vuelto a recuperar unos niveles de agua adecuados para acoger a esta especie, ha puntualizado Román, que ha recordado que, en 2018, la mayor parte de estas grullas tuvieron que viajar hacia otros lugares debido a que este importante enclave natural se encontraba seco.
Andalucía ha destacado por la baja cifra que presenta este año, con sólo 9.726 ejemplares, debido a que, en el norte de la provincia de Córdoba, había muy pocas aves en las fechas de censo, si bien en esta comunidad, por vez primera, se han censado ejemplares de esta especie en todas las provincias, a excepción de Jaén.
De hecho, el coordinador del censo ha precisado que se ha identificado un grupito en Almería, que se consideran migrantes seguros, y otro en Granada, concretamente en la localidad de Baza.
Invernantes regulares
Este último núcleo aparece en los censos, por vez primera, pero son invernantes regulares en este área, si bien, según Román, “su futuro es incierto debido a la desaparición de los cultivos tradicionales de cereal y de pastizales naturales en beneficio de los cultivos en intensivo”.
Este hecho preocupa también mucho en Extremadura puesto que “se están transformando miles de hectáreas de maíz, arroz o cereal en cultivos intensivos de olivos, almendros y otros frutales”.
En cuanto al resto de datos del censo, ha señalado que en Castilla y León se han censado 6.706 ejemplares y en Navarra la cifra se ha elevado hasta los 4.034 ejemplares.
En otras comunidades como las Islas Baleares se han registrado 108 ejemplares invernantes, en la comunidad de Valencia un total de 75 y en Madrid 71 ejemplares.
En Cataluña se han censado 58 ejemplares y en la comunidad de la Rioja un total de 28 ejemplares.
Y, por primera vez, aparece en Asturias un ave sueca perdida y una familia de 4 individuos en Galicia en un embalse de La Coruña.
Román ha avanzado que el Grupo de Trabajo y Conservación de la Grulla Común tiene previsto realizar un segundo censo el próximo día 1 de febrero.
