La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha apostado por el crecimiento del sector de la construcción pero “con cabeza”, al tiempo que ha pedido empleo de calidad y seguro en un sector que, según ha señalado, no debe asumir “jamás” como normal que el incremento de su actividad va unido al aumento de la siniestralidad.
“Nos importa que haya más empleo en el sector de la construcción pero no de cualquier manera”, ha enfatizado la ministra durante la clausura del acto del 25 aniversario de la Fundación Laboral de la Construcción de Castilla-La Mancha, donde ha abogado por la siniestralidad cero en este sector.
Según ha manifestado, “esta tarea nos incumbe a todos”: a los empresarios, a los trabajadores y las administraciones públicas, haciendo hincapié en el Plan Director por un Trabajo Digno puesto en marcha por el Gobierno de Pedro Sánchez, un plan que apuesta por el refuerzo de los recursos materiales y humanos de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, un refuerzo de la plantilla que será en torno al 23 por ciento, ha estimado.
Este plan también pretende controlar la figura de los falsos autónomos y el abuso que se está produciendo en este sentido, las falsas cooperativas o los contratos a tiempo parcial fraudulentos, ha proseguido Valerio, quien ha explicado que el Gobierno de Sánchez quiere recuperar el normal funcionamiento de órganos que llevaban cerca de diez años sin convocarse como el Consejo Nacional de Formación Profesional, quiere impulsar el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo y, entre otras cosas, ha retomado la mesa de diálogo social.
Asimismo, Valerio ha reconocido que el sector de la construcción ha atravesado una década “singularmente delicada”, de crisis, pero “poquito a poco” el sector se va recuperando, el sector está contribuyendo al crecimiento económico y a la calidad de vida en este país.
“Este sector ha tenido pasado, tiene presente pero debemos luchar para que tenga un futuro mejor”, ha destacado la ministra, quien ha dicho que para ello hay que apostar por sostenibilidad, economía circular, por la internacionalización del sector, así como hacer una gran apuesta por la rehabilitación, por mejorar la eficiencia energética de los edificios y su accesibilidad o regenerar zonas industriales deterioradas, barrios deteriorados o centrarse en el patrimonio histórico artístico donde hay mucho que recuperar.
También ha apostado por planes de infraestructura pública “potentes” ya que, según ha recalcado, “es una suma de la obra privada pero también de la inversión pública”.
Además, ha abogado por la formación específica de los trabajadores del sector y ha dicho que hay que hacer ver a los jóvenes que en la construcción “hay trabajo y hay futuro”. “En la construcción hay cemento pero también hay talento y mucho”, ha apostillado la ministra.
Igualmente, ha criticado a quienes durante estos últimos años han denostado al sector de la construcción como si sus trabajadores hubiesen sido los responsables de la crisis.
TRANSFORMACIÓN TECNOLÓGICA
Valerio también ha hablado de la transformación tecnológica y ha asegurado que “si pensamos que el sector de la construcción va a estar al margen de esta revolución tecnológica estaríamos equivocados y deberíamos cambiar el chip”, aunque no obstante ha defendido que la visión artesanal de la construcción no hay que perderla nunca.
