La literatura de Blue Jeans es “muy sencilla, fácil de entender”, sus libros “se leen rápido, no cuestan y te dejan con ganas de leer más”, asegura Leticia Pozo, que con 15 años quedó prendada de ‘Canciones para Paula’ y este jueves, con 21 años, acudió a que el autor sevillano le firmara en el antiguo Casino las dos primeras entregas de la trilogía de ‘La chica invisible’.
De la novela juvenil romántica, con la que se ha ganado a un amplísimo público adolescente, sobre todo femenino, Blue Jeans ha dado el salto al thriller también juvenil con unos ingredientes como suspense, intriga e inesperados giros que han sumado a sus anteriores seguidores a muchos jóvenes varones como Jesús López, también de 21 años, quien, tras devorar las páginas de ‘La chica invisible’ y la segunda entrega ‘El puzle de cristal’, está deseando que llegue a las librerías el tercer volumen de la trilogía.
Inmerso en su elaboración, Blue Jeans reveló que va por el capítulo 41 de este tercer libro, que tendrá 72 capítulos como los dos anteriores y que tiene previsto terminar de escribir el 1 de diciembre. En el encuentro con sus lectores organizado por la Biblioteca Pública del Estado y las Bibliotecas Municipales, el autor andaluz confesó que le ha “dado mucho la novela juvenil romántica”, pero necesitaba sumergirse en “algo distinto”, con lo que se ha pasado al misterio, a lo que suele leer, apostando por crear con esta trilogía “una especie de Agatha Christie –su escritora favorita- para jóvenes y actualizada en el siglo XXI con chichos de hoy en día”.
En su tercera visita a lo largo de su carrera literaria a Ciudad Real, con la que culmina los más de cuarenta encuentros de firmas de libros que ha realizado este año, Blue Jeans destacó la importancia de ser disciplinado y exigente en el proceso creativo, durante el cual se pasa siete u ocho horas escribiendo, habitualmente en cafeterías, costumbre que adquirió cuando, antes de publicar nada, vivía en una apartamento de apenas 27 metros cuadrados en el que no tenía ni mesa.
Como tímido e introvertido se definió Blue Jeans, alias literario de Francisco de Paula Fernández, que recordó que tras estudiar Periodismo y no encontrar trabajo se tiró un par de años escribiendo una novela de misterio que fue rechazada por todas las editoriales. Pese a ese revés, no se dio por vencido y pensó en cómo llegar a la gente, algo que consiguió con mucho tesón diario a través de las redes sociales. “No es que empezara de cero, es que empecé de menos veinte”, confesó este autor superventas, cuyas obras ahora se traducen a, entre otras lenguas, húngaro, polaco y ruso y que indicó que con el éxito cada vez son mayores los compromisos y hay más presión pero valoró la suerte de poder dedicarse a lo que le gusta. En este sentido, animó a los jóvenes que acudieron al encuentro a que, aunque no consigan a la primera sus sueños, no dejen de intentarlo, pero siempre haciéndolo con ilusión y sin pisar a nadie por el camino porque lo bonito es llegar, pero haciéndolo bien.
Autor de personajes, porque le interesa mostrar lo que sienten; de una literatura de frases cortas, lo que procede de su formación periodística; y de novelas muy corales, con lo que el lector tiene muchas opciones para sentirse identificado; comentó que adoptó el nombre de Blue Jeans de un tema del grupo alemán Sqeezer, del que le gustó la sonoridad del título y no tanto la canción en sí, para escribir en las redes sociales sin que se supiera mucho de él y se valorara sobre todo su forma de escribir y los personajes que creaba. Al final, la editorial Everest que publicó su primera novela apostó por este alias que hoy, diez años y trece novelas después, se ha convertido en una “marca muy consolidada de libros juveniles”, con lo que no descarta firmar como Francisco de Paula Fernández si diera el paso de escribir obras para otros públicos.
De su padre, que ejerció de procurador, y de su hermana psicóloga ‘echa mano’ para verificar el realismo de todo lo que aparece en esta trilogía de misterio, comentó Blue Jeans, que indicó que en China va a aparecer próximamente ‘La chica de cristal’ que ha promocionado en Italia este año, al igual que en Latinoamérica, donde el recibimiento que tiene es “bestial”. Tanto es así que, reconoció, el único sitio donde no consigue terminar las firmas de ejemplares es Lima ya que cierran los centros comerciales y sigue esperando gente la rúbrica en sus títulos.