En la obra, Rumbo, interpretado por Rubén Carretero, es un payaso viajero, nómada, un personaje tierno y carismático, que, debido a los conflictos sociales de donde vivía, tiene que abandonar su hogar y emprender un nuevo camino.
Cargado con sus baúles y lo poco que le queda, intentará transmitir al público todo el amor que lleva dentro a través del juego y de su manera de conectar con las personas mediante el teatro gestual.
Magia, malabares, música en directo con flauta travesera, manipulación de humo y mucho humor convergerán en un espectáculo con el que el disfrute del público y la emoción están aseguradas.