El Cristo de la Vega juvenil disputaba este sábado partido de liga en Villarrobledo ante uno de los equipos de la localidad vecina. Los socuellaminos habían solicitado adelantar la hora del partido en la medida de lo posible puesto que varios de sus jugadores recibían el sacramento de la Confirmación y lógicamente no podrían asistir al encuentro. Aún así, y en su derecho, puesto nadie del Cristo de la Vega puso mayor objeción al respecto, fijaron la hora del partido a las 20:00 del sábado, lo que hizo que el Cristo de la Vega se presentase en cuadro y sin porteros, pero eso no fue óbice para que superasen claramente a su rival, lo que debió escocer sobremanera y cuyo único argumento fueron las malas artes, sobre todo por parte del mayor responsable de la educación de los chavales, el entrenador. El técnico socuellamino nos explicaba lo sucedido para que su rival decidiese retirarse del campo a falta de diez minutos para el final del partido con un marcador adverso de 0-3.
“Los últimos minutos fue una vergüenza. Su entrenador desde la primera mitad insultando gravemente al árbitro y eso no se puede consentir y varios de sus jugadores igual, en el descanso y también a nuestros jugadores” explicaba Cuevas.
“También es un error por parte de la Federación poner un árbitro de la misma localidad y con 16 años” matizaba.
Se desencadena la polémica
“En la segunda parte metemos tres goles y cuando quedaban diez minutos se vinieron abajo, hubo una agresión sin balón a un jugador nuestro y el árbitro que ya no podía aguantar más lo expulsa aunque sabía que se iba a liar”.
El principal culpable
“El principal culpable de todo fue su entrenador que en ese momento se fue como loco hacia el árbitro y todos sus jugadores reaccionaron de la misma manera, incluso el público. Menos mal que había mucha gente de Socuéllamos en la grada y pudieron separar pero si no nos comen. El público quería pegar al árbitro, que se tuvo que encerrar, fuimos nosotros quienes tuvimos que llamar a la Guardia Civil que se portó fenomenal”.
Muy mala sensación
“Me quedo con una sensación muy mala, no me gusta, esto no es deporte, si soy un entrenador polémico se habría liado bien aunque ya veníamos avisados por el otro equipo de Villarrobledo”.
Posibles consecuencias
“El entrenador dijo que no jugaban más y el árbitro así lo reflejó en el acta, decidirá el comité, no sé si darán el partido por perdido definitivamente o se jugarán los diez minutos que quedan en campo neutral”.