El Almagro está preparado para otra final. Otra más. “Desde que llegué al Manuel Trujillo todos los partidos son finales”, explicaba con ironía Javier Bermúdez en la previa del encuentro. Y es que el conjunto rojillo viajará a Mora este sábado (19 horas, dirigido por Gonzalo Sánchez) para afrontar una nueva batalla a cara de perro.
Llega el Almagro a la cita después de rascar un empate el pasado domingo ante el Calvo Sotelo para dar un paso importante en la clasificación. Con 35 puntos, los pupilos de Javi Bermúdez marchan décimo quintos en la clasificación con tres puntos de ventaja sobre el descenso, justo la ventaja que hay entre ambos en la clasificación, por lo que una victoria rojilla supondría dar un golpe importante en la tabla y dejar casi fuera a un rival directo por el descenso.
Por su parte, el Mora llega a la cita después de caer con el líder por 3-0 en el Paquito Giménez. El resultado fue lo lógico dada la condición de ambos, pero el conjunto moracho sigue aferrándose a Las Deliciass para agarrarse a la permanencia.
Mientras tanto, el rosario de bajas sigue siendo habitual en el Almagro. Raúl, Buda, Juanlu y Rami se perderán el encuentro por lesión. Sin embargo, Vílchez podría llegar a tiempo para afrontar esta difícil recta final de campeonato.
“Vamos a intentar ganar como siempre sin tener en cuenta el rival ya que a estas alturas todos los equipos se juegan algo y por eso son peligrosos”, explicaba Javier Bermúdez en la previa del encuentro mientras matizaba que “los dos equipos estamos necesitados, pero ellos tienen más problemas que nosotros porque están en descenso y veremos quién arriesga más y tira del partido”.
En cualquier caso, sea como fuere, para el técnico del Almagro “será un partido muy igualado y el que se equivoque, perderá y el que no se equivoque terminará llevándose el partido”.