El alcalde de Piedrabuena, José Luis Cabezas, celebra la publicación del estudio informativo para el acondicionamiento de la N-430 y que responde a parte de las demandas de los pueblos de la comarca, incluidos Luciana y Puebla de Don Rodrigo. Contempla variantes en los tres pueblos por los que pasa, además desdobles en tres carriles en algunos tramos para facilitar los adelantamientos por la gran afluencia de tráfico pesado, y un nuevo pavimento en toda la longitud de la calzada, desde Ciudad Real a Mérida, ya que está muy parcheada.
“Desde hace muchos años forma parte de nuestras reivindicaciones, que son mayores incluso, porque nosotros queremos que se transforme en autovía, pero esto es un buen comienzo para la mejora de las comunicaciones”, confiesa a Lanza, al mismo tiempo que recuerda que las primeras reuniones con el director general de Transporte fue durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (2004-2011).
José Luis Cabezas habla claro. “El Gobierno de Pedro Sánchez es el que hasta ahora más ha hecho por la N-430. Lo felicito porque es el que ha dado un paso muy importante para nosotros. Mariano Rajoy no hizo nada en 8 años y Zapatero tampoco”, explica. Ahora bien, insiste en que el trabajo todavía no está hecho: ahora tendrán que evaluar el impacto ambiental, elaborar el proyecto definitivo y luego salir la licitación.
“Cuando se contrata a una empresa es muy difícil dar marcha atrás”, pero para eso, señala José Luis Cabezas, “pueden pasar dos años más”. La obra está presupuestada en alrededor de 300 millones de euros y el alcalde está seguro de que se “troceará” en partes el proyecto global, lo que puede llevar a un desarrollo en “dos legislaturas”. Eso sí, el primer edil espera que “en la próxima varios proyectos estén encarrilados e incluso ejecutados”.
El “derecho” de los pueblos de la N-430 a tener autovía
El objetivo último de la comarca es que la N-430 se convierta en autovía y que el trazado de la A-43 discurra por la “opción norte”, pese a que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha de Emiliano García-Page apuesta por la “opción sur”, por Puertollano y Almadén, como han vuelto a recordar esta semana y lo hacen cada vez que la nacional se convierte en actualidad.
Cabezas, que ha sido director general de la Junta durante 8 años, no quiere levantar suspicacias, pero considera que “el tema se ha planteado mal desde el principio”. “Las comunicaciones en esta comarca hay que mejorarlas y es innegable que la N-430 pasa por aquí y que los que la hicieron no eran idiotas, quizás valoraron que suponía menos kilómetros, costaba menos y generaba menos impacto ambiental. Es un derecho que nos querían quitar”, señala.
No por ello olvida las necesidades que tienen también Puertollano y Almadén, pero añade que “hay que buscar soluciones para todo el mundo” e insiste en que “no se pueden solventar los problemas de uno perjudicando a los otros”. De hecho, Cabezas señala que por ejemplo “nunca se han sentado bien todas las partes, los Gobiernos regionales de Extremadura y Castilla-La Mancha, además de los ayuntamientos y el Ministerio”.
El trazado de la variante de Piedrabuena
En el caso de Piedrabuena, la variante que contempla el estudio informativo y sobre la que la Junta de Comunidades ha hecho dos propuestas en el periodo de alegaciones. Ambas contemplan un trazado por el sur del casco urbano, que saldría del entorno de la ermita de San Bartolomé y terminaría cerca del restaurante Los Pucheros.