La pandemia y la escasez de ingresos marcan un futuro incierto para la Asociación de Familiares y Amigos de Personas con la Enfermedad de Alzheimer y Otras Dependencias de La Solana (AFAAD). Así lo ha anunciado la junta directiva en la asamblea anual ordinaria. El colectivo intenta reinventarse ante las vicisitudes, mientras el Covid sigue agravando la situación de enfermos y también de sus cuidadores.
“Hacemos lo que podemos con los pocos recursos que disponemos” indicó la presidenta, Jose Chacón, a la emisora municipal. Después de un parón obligado por las circunstancias, intentan coger el pulso a las actividades cotidianas “hemos recuperado las terapias a domicilio y esperamos continuar con ellas gracias a los donativos, las cuotas de los socios, la venta de lotería y las subvenciones”. Al respecto, recalcó que “de las cuatro subvenciones que tenemos, sólo nos han dado dos de momento”.
Ante este panorama “tenemos mucha incertidumbre porque dependemos del dinero que nos llega, que no es mucho, y ya nos ingeniaremos algo para seguir adelante”, señaló la vocal Jacin Moreno. En este sentido, habló de una iniciativa que surgió tras la pandemia “hemos ofrecido ayuda psicológica a los enfermos y familiares a través del teléfono y ha sido muy beneficioso para todos”. También se han apoyado en las nuevas tecnologías para dar pautas y terapia cognitiva a los enfermos. Las directivas de AFAAD reiteraron que el Covid está provocando un daño extra a los enfermos de Alzheimer “las conductas se agravan y la demencia también aumenta. Convivir con una persona así es muy complicado”, argumentaron.
Finalmente, apelaron otra vez a la solidaridad de la ciudadanía. Confían en la llegada de donativos y también en aumentar su masa social, “son sólo diez euros al año y podemos hacer muchas cosas y ayudar a mucha gente”, apostillaron.
El cónclave se celebró en el auditorio del Palacio Don Diego, con todas las medidas sanitarias y la asistencia de un puñado de afiliados.