Los sindicatos CCOO y UGT de Ciudad Real han visto “positiva y “necesaria” la propuesta de la líder de Sumar, Yolanda Díaz, para que se fije por ley una jornada laboral máxima de 37,5 horas semanales en 2024 y se vaya reduciendo progresivamente hasta fijarla en 32 horas, sin merma en el salario. Sus líderes provinciales, José Manuel Muñoz y Alfonso Álvarez, respectivamente han recordado que forma parte de sus reivindicaciones históricas “para mejorar la conciliación”, y que ha de hacerse mediante el diálogo social, mientras que el presidente de la Federación de Empresarios de Ciudad Real (FECIR), Carlos Marín, ha denunciado la baja productividad de las empresas españolas, “la más baja de Europa”.
“Compartimos plenamente”
El líder de CCOO ha dicho que se trata de una cuestión que “compartimos plenamente” y que “no es nueva para CCOO”.
De hecho, es un avance que “hemos conseguido en algunas empresas y en administración” y forma parte del argumentario básico del sindicato en la negociación colectiva, ante la necesidad de que “los trabajadores tengan más tiempo para conciliar su vida familiar y laboral”.
En opinión de Muñoz, la reducción del presentismo y la flexibilización de los horarios aumentaría la productividad.
Respecto al SMI y la consideración de la propia vicepresidenta segunda del Gobierno de que represente más del 60% del salario medio, ha dicho que las subidas salariales siempre benefician a los trabajadores. Por ello, Muñoz ha dicho esperar que el próximo gobierno que salga de las elecciones del 23 de julio “tenga esa predisposición de seguir aumentando el SMI, porque “se ha demostrado que la subida experimentada en los últimos años no ha sido un fracaso, ni ha supuesto más despidos sino, sino que “ha generado más empleo y ha reactivado la economía”.
Menos fatiga
Por su parte, Alfonsí Álvarez se ha mostrado en la misma tesitura y ha calificado de “positivas” estas medidas. Las relaciones laborales no se miden por “la proporción directa del tiempo de trabajo con la productividad, como quieren los empresarios”, sino que “menos horas implican menos fatiga y más productividad”.
“Es un avance importante, ha agregado, del que ya se está hablando en otros países de la Unión Europea porque es muy fructífero”.
Respecto a la ponderación del SMI también ha sido “recibida con alegría por la UGT” porque “estamos a la cola de Europa en cuanto a salarios y hay que erradicar que haya trabajadores que no llegan a fin de mes”. “Es muy favorable que el Gobierno facilite este tipo de cuestiones”, ha concluido.
Baja el ahorro de las familias
Por su parte, Marín ha llamado la atención sobre la reducción de la productividad, “que está muy tocada”, y la disminución del ahorro de las familias y la renta, que pueden constituir “un problema insalvable”.
Po ello, ha calificado de “ocurrencia de campaña” y de “brindis al sol” la reducción de las horas de trabajo propuesta por Díaz, quien, a su juicio, “siempre carga el peso de la prueba y el coste sobre las empresas”, cuando, al contrario, habría que apoyar a los emprendedores y autónomos para que “haya más empleo, más contratos y más trabajadores”.
En lo referido a más subidas del SMI ha vaticinado “más destrucción de puestos de trabajo” por el cierre de empresas, y que los autónomos no puedan soportar el aumento de cotizaciones.
A juicio de Marín, “la mejor manera” de introducir avances en las relaciones laborales pasa por “los convenios y la negociación legitimada entre empresarios y trabajadores”.
Lo contrario “son ocurrencias de la ministra que no ha hecho su trabajo”, ha apostillado.