Alumnos de cuarto de Educación Secundaria han demostrado su implicación en el uso responsable de las redes sociales frente a la violencia de género y el acoso durante el primer Encuentro Provincial de Ayudantes TIC que ha acogido este jueves la Casa de Cultura de Manzanares.
Siete institutos de Manzanares, La Solana, Socuéllamos, Campo de Criptana y Argamasilla de Alba han participado en el programa impulsado por el Instituto de la Mujer, en coordinación con los ayuntamientos, para formar en el uso adecuado de las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación.
Cabe destacar que el programa no sólo ha incluido formación para los jóvenes comprometidos con el proyecto, sino que ellos mismos han pregonado los riesgos que conlleva tener una cuenta abierta de Facebook o subir fotos inapropiadas en Instagram ante alumnos de menor edad.
Una estrategia “transversal” frente a la violencia de género y el acoso
La responsable provincial del Instituto de la Mujer, Carmen Pimienta, ha destacado los buenos resultados del programa de Ayudantes TIC y la colaboración entre la Administración regional, locales, entidades del tercer sector y colegios.
“La erradicación de la violencia de género y la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres tiene que tener una respuesta transversal”, ha expresado Pimienta, como estrategia de trabajo del Gobierno de Castilla-La Mancha.
Acompañada del director provincial de Educación, Cultura y Deportes en Ciudad Real, Francisco Navarro, y de la concejala de Políticas de Igualdad, Beatriz Labián, la responsable del Instituto de la Mujer ha señalado que “los jóvenes están conectados en la mayor parte de su tiempo libre”. Las chicas dedican a las TIC un 86% de su tiempo libre y los chicos un 82%.
Por eso, Carmen Pimienta ha expresado que “es muy importante que conozcan los riesgos de las nuevas tecnologías y sean capaz de detectar las claves para prevenir la violencia de género”, además del acoso.
Límites frente a la “sensación de impunidad”
En este sentido, Francisco Navarro ha afirmado que “las TIC difuminan la frontera entre lo privado y lo público” y a veces “dan una sensación de impunidad que lleva a actuaciones que no son aceptables”, ni desde el punto de vista social, ni legal.
Por eso, los alumnos deben de conocer los “límites” de las redes, como una interacción social más. “Los chavales tienen que entender que las redes sociales deben de ser usadas con la misma prudencia que tienen en el resto de las relaciones sociales”.
En la misma línea, la concejala de Políticas de Igualdad de Manzanares, Beatriz Labián, ha recalcado que además el encuentro ha cumplido con un doble objetivo: ser un espacio “para el intercambio de experiencias que refuercen y enriquezcan a los siete centros que han participado” y al mismo tiempo dar a conocer las ventajas del proyecto.
La concejala manzanareña, junto al también edil de educación, Juan López de Pablo, ha expresado que el proyecto ha demostrado que la “metodología funciona”, ya que implica directamente a los chavales en la divulgación y la información preventiva resulta mucho más atractiva para los menores si llega en boca de sus propios compañeros.
Los jóvenes son “modelos de referencia”
Así pues, tres alumnos de quince años del instituto Azuer, Mario, Irene y Mireia, han aprovechado para contar su experiencia. Para Irene la experiencia ha sido “buenísima”, ya que ha podido detectar usos inadecuados de las redes sociales por parte de alumnos de sextos de Primaria y sobre todo prevenir el “ciberbullying”.
En la misma línea, Mireia ha expresado que los niños han sido “muy participativos” y ha comprendido la importancia de poner “cuentas privadas”, que los padres mantengan vigilancia de las redes sociales y de denunciar el acoso, sobre todo a través de whatsapp, que es quizás la más utilizada en este sentido.
El representante de la asociación Punto Omega, que ha trabajado este año con más de 15.000 jóvenes en 60 localidades de la provincia, ha recordado la frase de Eduardo Galeano que dice “mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”.
Y precisamente eso es lo que representan los nuevos Ayudantes TIC, que hoy en día son “modelos de referencia” para los jóvenes de la provincia y que han creado las bases necesarias para el “cambio” frente a la vilencia de género y el acoso.