Javier y Beatriz son los padres de Ainhoa quienes ayudan a su única pequeña a hacer realidad este sueño como fieles colaboradores en la edición de los videos que más tarde subirán a la red.
No es una actividad muy habitual a los cinco años, pero Ainhoa sigue adelante con su “juego”. El padre de Ainhoa explica que en principio todo surgió como una forma de jugar con la niña, “a ella le gustaba hacer esto y nosotros pasábamos así más tiempo con ella haciéndolo como si fuera un juego”. Reconoce que Ainhoa dedicaba parte de su tiempo a ver vídeos de otros niños a través del famoso canal de Youtube y, por este motivo, comenzó la idea de que ella fuera también una de las protagonistas de esos vídeos que ella misma presenciaba en internet. “Es otra forma de entretenimiento”, dice Javier Ruiz al respecto “y de pasar tiempo con ella divirtiéndonos y entreteniéndonos”.
Ainhoa es, según sus padres, “una niña tímida en ocasiones, aunque es una niña superactiva, le gusta jugar como a todos los niños y se divierte con esto”, explica y continúa “hay veces que ella sabe más que nosotros”, aunque son sus propios padres los que a veces le proponen los temas sobre los que pueden hacer un nuevo vídeo. En ocasiones son juegos inventados, otras son videos explicativos de juegos comprados que animan a otros niños a jugar y enseñan a la gente cómo hacerlo y a veces son vídeos que hablan sobre una determinada época, por ejemplo, la Navidad, un tema del que ya tiene en su canal algún ejemplo.
Es una ventura que ha comenzado hace relativamente escaso tiempo y que, con una periodicidad semanal, estos vídeos están en Youtube. Para cada uno de ellos dedican hasta una hora y media de grabación en un estudio con un chroma-key que han montado en su propio domicilio, en Argamasilla de Calatrava, al que ya han instalado luces para que la imagen tenga un carácter más profesional, al igual que la cámara con la que realizan estas grabaciones.
En tan sólo dos meses ya ha subido seis vídeos y esperan ir multiplicando los suscriptores de su canal, de momento cuentan con medio centenar y hasta casi cuatrocientas visualizaciones en algunos de los videos insertados, si bien reconocen que llevan poco tiempo en este “mundillo” y esperan que en un futuro se vayan incrementando, de hecho hay otros niños que comenzaron igual que Ainhoa y llevan ya miles de suscriptores.
A pesar de que su hija tiene sólo cinco años, Javier Ruiz afirma que “estamos muy encima de ella para que no confíe en cualquier persona”, dado que sus propios amigos y compañeros ya conocen este atípico hobbie que Ainhoa ha buscado para su edad y pasar su tiempo y comienza a ser la mirada de muchas personas que para ella son desconocidas.
El último video que ha subido a Youtube es para que otros niños aprendan a jugar con los famosos Bunchems contaba con casi un centenar de visualizaciones a las horas de subirlo a Youtube, unos datos que tanto a Ainhoa como a sus padres les motivan para seguir adelante con su particular proyecto.
Son cinco años y para ella es “jugar con papá y mamá, sí me gusta que me graben”, dice con su vocabulario de su corta edad, pero es consciente de que a sus amigos también les gustaría ser como ella, “se lo he contado lo que hago y dicen que quieren hacerlo también”. Ainhoa Ruiz sigue con su particular juego, el de jugar a ser una mini-youtuber en las redes, en su “Jugando con ainhoa”, un juego que asegura “me divierte y aunque me canso otro día hago otro”.