Por el pensamiento de cada uno de los asistentes a la celebración del 50 anivesario del hospital Santa Bárbara han pasado los momentos tristes y felices vividos entre las paredes de este edificio, los cuidados realizados con el mimo y cariño de estos profesionales, las conversaciones con los médicos que te atienden, la imagen de las limpiadoras realizando su trabajo o de los celadores trasladándote hacia algún servicio para realizar una prueba diagnóstica. Es la vida diaria del hospital Santa Bárbara de Puertollano, la que lleva realizando desde hace medio siglo y la que se ha puesto en valor en un día muy importante, porque no todos los días se cumplen 50 años de vida.
En un acto muy emotivo, amenizado por la guitarra con Francisco Javier Pascual, los asistentes a este acto pudieron recorrer el pasado, presente y futuro de este centro hospitalario. El pasado en palabras de Dolores Gómez, perteneciente a la primera promoción de enfermeras que, en el año 1973, comenzó su labor profesional en este hospital. Gómez explicó las diferencias que existían entre el ayer y el presente, “las mujeres no podían sondar a los hombres, las mujeres hacíamos 3 ó 4 noches frente a las 7 de los hombres, y por supuesto, cobraban menos las mujeres”, unos cambios que afortunadamente han seguido andando con paso firme hacia la igualdad. Gómez recuerda el gran vínculo que se establecía con las familias, la forma de empatizar con ellas, pero también de la vocación de la enfemería, de las ganas de trabajar, ayudar y cuidar.
El presente estuvo representado por Daniel García Fuertes, jefe de cardiología del hospital Santa Bárbara, que explicó por qué había decidido quedarse en este centro hospitalario. Así, se refirió al buen trato entre compañeros, de nuevos proyectos a desarrollar en el hospital y de intentar mejorar por los pacientes, “por eso me quedé”, explicaba a los asistentes, señalando además que “después de 12 años y tres manchegos no me arrepiento de haber cambiado un hospital grande por un gran hospital”. García Fuertes considera que la experiencia de trabajar en un hospital comarcal la deberían tener todos.
El futuro llega al hospital de Puertollano con la recuperación de los médicos residentes y con las palabras que Constanza Muñoz, jefe de estudios de la GAI de Puertollano, y Miriam Fariña, residente en el hospital Santa Bárbara, dirigieron sobre su experiencia en este centro hospitalario en representación de cada uno de los residentes que en estos momentos realizan sus tareas en el Santa Bárbara completando su formación y abriéndoles las puertas hacia su futuro profesional.
Entre las paredes del Santa Bárbara
El gerente de la GAI de Puertollano, Cesáreo Peco, dedicó un emotivo relato para todos los asistentes en el que entablaba un diálogo con el centro hospitalario haciendo un repaso a cada uno de los sentimientos que los profesionales sanitarios sienten cuando entran por estas puertas hospitalarias del Santa Bárbara. De los desvelos de la gerencia ante los problemas que llegan, de los tiempos felices por los nuevos nacimientos, de los tiempos tristes cuando se dejan atrás a seres queridos, pero también al divisar, a través de las ventanas del actual edificio, el futuro de este centro hospitalario, la construcción de un nuevo edificio que sustituirá al existente con la sensación del deber cumplido y de haber hecho por la sociedad de Puertollano todo lo que haya estado a su alcance.
En estos 50 años del hospital Santa Bárbara se valora cada uno de los momentos y días que han sido protagonistas entre las paredes de este hospital o de cada una de sus habitaciones, porque en ellas quedan también los sentimientos de todos y la sensación entre los sanitarios de que se hace el mejor trabajo. “No te quepa duda de que fuera de estas paredes se te quiere y se te respeta”, decía en su conversación con el Santa Bárbara Cesáreo Peco.
Cesáreo Peco pidió a todos los asistentes levantar su copa imaginaria para brindar y dar la enhorabuena por un hospital que con sus 50 años de vida ha visto cumplido también su compromiso y su buen servicio.
Un hospital termina su vida y está naciendo otro
El consejero de sanidad, Jesús Fernández, clausuraba este importante acto de celebración de esta efeméride señalando que en estos últimos meses se ha celebrado los 50 años del hospital de Manzanares, Valdepeñas y ahora Puertollano. “Un día muy bonito porque vienen a la mente muchos recuerdos y demuestra que la renovación de las infraestructuras no dejan de ser un gran acontecimiento, allí donde estamos viendo como termina un hospital su vida y como nace con un 11% de construcción la obra del nuevo hospital de Puertollano”. Un nuevo centro avanzado tecnológicamente y con una dimensión mayor, con 150 millones de inversión si se añade su equipamiento total. “La sanidad y la salud importa a este gobierno, porque la frase de la salud es lo más importante queda vacía en algunos gobiernos, pero ahora no es una frase vacía, la sanidad y la salud nos importa”, justificó.
Aula de simulación virtual
El consejero de sanidad anunció que se va a instalar frente al hospital un aula de simulación virtual para simular los procesos e intervenciones que se van a realizar posteriormente en la realidad, porque “nos importa la formación”. Fernández valoró de una manera importante que los residentes hayan regresado al hospital Santa Bárbara de Puertollano, en estos momentos 29 personas formándose en este centro hospitalario, y con los datos que avalan que el 70% de los profesionales que se forman en la región se quedan en esta tierra. Además, el consejero de sanidad recordó que “aquí hemos puesto 170 profesionales más en los últimos años”
Por su parte, Adolfo Muñiz, destacaba que este aniversario del hospital Santa Bárbara de Puertollano coincide con la construcción del nuevo hospital. “Este tipo de instalaciones en su día, hace 50 años, marcó un hito en la ciudad, igual que el que se construye en estos momentos también marcará un hito en la atención sanitaria de Puertollano y de la comarca”.