En palabras de Risueño, “la incapacitación no es hacer de menos a la persona, sino solucionar su vida y hacerla más cómoda, es una muestra de apoyo y solidaridad para con ella; la incapacitación ayuda a gobernar su persona y sus bienes, nace y se desarrolla en el ámbito de la protección a la persona”. Fueron casi dos horas de charla y diálogo posterior que se hicieron cortas a los asistentes.
Esta charla se enmarca dentro de las actividades que se vienen haciendo con las familias desde la Asociación de Alzheimer de Tomelloso en su Centro de Día San Rafael; este grupo de familias también está abierto a aquellas personas que, sin tener vinculación con el Centro de Día, necesitan apoyo, ayuda, comprensión y también formación e información, para afrontar de forma óptima su condición de cuidadores de personas con Alzheimer u otras demencias. Este grupo se reúne los últimos jueves de mes a las 5:30 de la tarde.
El Centro de Día San Rafael quiere expresar su agradecimiento a Carmelo Risueño por donarles su tiempo y su talento para ponerlo al servicio de estas familias y cuidadores.
Asimismo también agradecen a las familias la buena respuesta siempre a las iniciativas llevadas a cabo por la Asociación de Alzheimer de Tomelloso.