El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha destacado este jueves que el hecho de que el pleno del Parlament haya vetado la designación del secretario del PSC, Miquel Iceta, como senador autonómico con los votos de ERC, JxCat y la CUP, «no solo es una faena» a los catalanes y a la democracia sino que evidencia que «lo único que quieren es llevárselo» y «romper España para tener privilegios».
Así lo ha indicado durante su intervención como candidato del PSOE a la Presidencia de la Junta en un acto con representantes de asociaciones y de candidatos de la comarca en el convento de Santo Domingo en Villanueva de los Infantes, donde ha visitado la celda de Francisco Quevedo.
Ha admitido que le «revientan mucho los políticos que, como si fueran unos populistas más, utilizan el territorio como los independentistas en Cataluña, para hacer demagogia y engañar a su gente» y que «se saltan la ley cuando les conviene», instándoles a especificar «qué democracia les importa ahora».
Así, ha indicado que la «faena» que están haciendo a los catalanes y a la democracia en España vetando a Iceta es algo que al final se pasará, para resaltar que lo importante es «que todo el mundo tome nota» porque «si hay un partido dispuesto por la vía del diálogo a ayudar es el PSOE».
A su juicio, hay una diferencia entre respetar la Constitución y «ser el incordio», convencido de que esto último es «romper España». «No se van a salir con la suya», ha añadido García-Page, que ha subrayado que «cuando se habla de España, decidimos todos» y él no dejará de «ser claro» en este asunto, ha avisado.
