En el seno del Miguelturreño hay un malestar por los arbitrajes sufridos por el equipo en los tres últimos partidos, que acabaron con derrotas. Ante el Conquense y con 0-0 en el marcador, Lope fue expulsado antes del descanso con una roja directa totalmente errónea, en una jugada en la que el delantero rival ni tenía el balón controlado, ni era una ocasión manifiesta de gol. Siete días después, en casa, los locales se quedaron parados cuando el balón salió con claridad por la línea lateral; ni el linier ni el árbitro decretaron nada y esa jugada acabó en el 0-1 para un Guadalajara que terminó ganando por 0-3. Y este pasado domingo, también con 0-0, el Albertillo fue expulsado en Mora después de que fuera objeto de penalti y se golpeara contra la valla. El atacante fue amonestado por entrar luego al campo y recibió la segunda amarilla por quejarse. Al final, el cuadro toledano aprovechó su superioridad para imponerse por 3-0.
“No decimos que haya una caza de brujas, pero sí que ha habido errores arbitrales de bulto que han condicionado estos últimos partidos. Luego podíamos haber perdido igual o no, pero eso ya nos perjudica y nos parece una pared difícil de superar. Once contra once somos un equipo que luchamos y si pasa esto es complicado”, explica Juan Pablo Trujillo, el presidente del Miguelturreño que sí que confiesa que por estos fallos de los colegiados “los jugadores están psicológicamente un poco tocados”.
Para Trujillo “es muy difícil arbitral y todos cometemos errores. Pero si yo los hago en mi trabajo tengo una sanción o una represalia. Aquí, salvo algunos, el nivel arbitral en general es malo y te encuentras con fallos garrafales”. Eso sí, el máximo mandatario del ‘Reño’ quiere dejar claro que, en su opinión, “esto nos está pasando ahora a nosotros, pero otro día puede que sea a favor nuestro”.
Juan Pablo Trujillo, al igual que toda la plantilla, quiere tratar de dejar este tema aparcado, confiando en que no vuelvan a repetirse más errores arbitrales. El objetivo ahora es preparar de la mejor manera el próximo duelo, un derbi en casa ante un Almagro que también está metido en la zona baja de la clasificación.