El presidente del Partido Popular en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha mostrado su firme respaldo con el colectivo de personas mayores y se ha comprometido a “redoblar” su defensa “para combatir la soledad y desigualdad” de los mayores que viven en el mundo rural. “El acceso a los servicios tiene que ser igual independientemente de donde vivan para estas personas que lo han dado todo y que son nuestro mejor presente y pilar fundamental de la sociedad”, ha dicho en Ciudad Real en un acto junto a Carmen Quintanilla, vicepresidenta de la Unión Europea de Mayores del Partido Popular Europeo (PPE), en la antesala del Día Internacional de las Personas de Edad, que se celebra el 1 de octubre.
Ha defendido las políticas de esta entidad europea para el bienestar de las personas de más de 65 años de edad, que apoya y respalda, y que en parte “están escritas con tinta manchega” (por la presencia de Quintanilla).
“La sabiduría y experiencia” de quien ha sido diputada y senadora del PP por la provincia de Ciudad Real “pone el sello manchego y español en la agenda política del PP en la Comunidad Europea, ha dicho, a la vez que ha agradecido a Quintanilla su trabajo.
Ha suscrito el manifiesto de dicho órgano para la celebración del 1 de octubre, y se ha comprometido a liderar la defensa “de nuestros mayores en Castilla-La Mancha”, sobre todo en tiempos de coronavirus, en el que han fallecido 20.000 personas de este ámbito.
“También sufren pandemia económica, y la soledad y discriminación, sobre todo en los ámbitos rurales”, al tener más dificultades para acceder a los servicios básicos. “Desde el PP trabajaremos por la igualdad de oportunidades y por la sostenibilidad del poder adquisitivo de los mayores”, con el fin de que el colectivo “sea uno de los focos de protección frente a la pandemia”.
Es uno de los trabajos en los que Núñez está centrado, al igual que en otras acciones “que han liderado la agenda política regional”, como el impulso a una ley contra la ocupación ilegal, en la que trabajarán para que “sea lo más completa posible”.
“También estamos centrados en defender a nuestros hosteleros”, frente al PSOE y su líder “que votaron en contra de no a rebajar el IVA a la hostelería, a los bares y al turismo, a que se extendieran los ERTEs, o a flexibilizar el pago de los ICOS para garantizar la vida de negocios como consecuencia del hundimiento económico por el coronavirus”.
También ha dicho esperar que este 1 de octubre, en la celebración del Día de la Edad, el presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, “anuncie que parte de los 700.000 test rápidos comprados en la región se realicen en las residencias de los mayores de la comunidad, como le propuse hace tres semanas”. “Sería una gran noticia porque es una pena que no se haga”. “Ojalá lo pongan en la agenda política” porque es una medida “necesaria, realista y útil”, ha concluido.
Contra la discriminación por edad
Por su parte, Quintanilla, ha condenado “la discriminación por edad”, y ha pedido solidaridad para garantizar la “dignidad” del colectivo y que sus miembros vivan una vida plena, independiente y en libertad.
“Envejecemos con mucha más calidad de vida qué hace 40 años porque gozamos de un bienestar social y sanitario que nos hace tener una larga vida, pero también hay que garantizar la dignidad de los mayores”, ha esgrimido, a la vez que ha lamentado las graves consecuencias de la pandemia entre ellos, con millones de muertos, “muchos de ellos solos”.
Por ello, la vicepresidenta de la Unión Europea de Mayores del PPE ha instado a “cambiar la forma de tratar a las personas mayores y empezar a exigir a las instituciones comunitarias y al Estado español el tratamiento de la dignidad”.
Muchas de estas personas “se sienten discriminadas”, y en su opinión, “hasta las propias organizaciones sanitarias, las institucionales o los partidos políticos apartan a las personas de mayor edad porque se tienen que jubilar”
Contra este trato, en el manifiesto del PPE piden “que todas las directivas comunitarias hablen del respeto a la dignidad humana, y que todos los acuerdos y resoluciones del Parlamento Europeo se basen en el respeto a la dignidad humana y a la integridad de las personas”.
“España tendrá que aplicar estas estrategias comunitarias a nivel nacional y regional”, ha dicho, porque es uno de los países más envejecidos, junto a Italia, Francia y Alemania, con más de 9 millones de personas de más de 65 años, que en 2068 subirá a más de 14 millones, y en 2050 superará al número de niños.
Además, en 1.108 municipios de España solo vive un niño.
Además, en las zonas rurales hay “más aislamiento, soledad, depresión y dificultades para llegar a fin de mes”, por lo que ha exigido al Gobierno “que no convirtamos la pandemia en un recorte o congelación de las pensiones”.
Ha compartido el dolor de quienes han perdido a familiares por el coronavirus y ha asegurado que “la intergeneración entre jóvenes y mayores es el futuro de la sociedad”.