Una amplia variedad de artículos funcionales, decorativos y siempre con el valor añadido de ser exclusivos y “muy particulares” se puede encontrar en la I Feria Estival de Artesanía que, organizada por Amiarte, se celebra hasta el domingo en la Plaza de la Constitución.
Dieciséis jaimas exhiben la creatividad de unos profesionales, todos ellos con carnet de artesanos, que ofrecen productos con un plus de originalidad “para todos los gustos y precios, y hechos con mucho cariño. Nunca ninguno es igual y se nota el amor que le ponemos”, además de que el cliente se lleva “algo exclusivo”, destaca Amparo Blázquez, vicepresidenta de una asociación cuyo primer paso, tan sólo cuatro meses después de crearse, es esta feria y que tiene ‘en cartera’ hacer muchas otras actividades como ofrecer talleres en colegios y residencias de personas mayores e impulsar iniciativas de colaboración con las Escuelas de Arte de Ciudad Real y Tomelloso.
En la feria, se pueden encontrar “cosas distintas que hace mucho que no venían a Ciudad Real y además exclusivas”, destaca Blázquez, en cuya jaima exhibe abanicos pintados a mano, parte de ellos de manchega, y cerámica también decorada artesanalmente. Además, este domingo realizará un taller demostrativo de pintura sobre un maniquí-cuadro.
Por su parte, entre otras propuestas expositivas, Álvaro Navarro, de la localidad toledana de Ciruelos, expone múltiples productos como pendientes, lámparas, tejas y apliques, elaborados con vidrio reciclado, principalmente de ventanas viejas que los cristaleros le dan cuando las cambian y de marcos de fotos. A través de termofusión en un horno especial a 800 grados, ablanda el vidrio y le da forma con un molde, explica Navarro, que presenta obras con recreaciones de icónicas piezas de autores como Sorolla y Dalí.
También, desde Navarra con taller en Cascante, ha acudió Ángel Mari Clemente, con su talla de madera de olivo que le permite crear desde menaje de cocina –como cucharones, paletas, ensaladeras y morteros- hasta lámparas y bastones. “La madera de olivo no tiene poros, lo que te posibilita hacer recipientes sin que los líquidos se cuelen, es muy resistente y muy bonita con un veteado espectacular”, describe Clemente, que indica que la trabaja en verde, ya que cuando se seca “es durísima, menos las tablas, como las de cortar alimentos, que se deja secar para que no se doblen”.
Sus productos, además de distinción, llevan naturaleza, “la vivencia del olivo”, a la cocina, agrega, para resaltar la particularidad, “no la encuentras en otro sitio”, de los artículos creados por artesanos, algo que “la gente aprecia”.
Otro de los artesanos participantes es el alcazareño José Ángel Cantos, con diversas creaciones realizadas en piedra artificial como amuletos, macetas, fuentes de agua, lunas fosforescentes que se iluminan en la oscuridad, recipientes para velas y símbolos celtas, así como la almagreña Rosa Adela Malagón Villanueva, que exhibe una selección de muñecas realizadas combinando distintas técnicas. “Hago el diseño, las relleno con fibra siliconada y las visto”, dándole a cada una expresión diferente porque su lema es que “cada muñeca sea única”.
Son “muchas horas de trabajo pero disfruto muchísimo con cada puntada que doy”, señala la artesana muñequera, que vende online a clientes de todo el país muñecas que dan ganas de “achuchar” y “llevárselas a casa”, como comentó una clienta este sábado nada más llegar a su stand.
Así mismo, entre otras líneas de creación artesanal, está en la Feria la de ‘Arte Vegetal’, de Santiaga Molina, de Daimiel, que crea con pétalos de flor prensada gamas de colgantes, pendientes, anillos, marcapáginas, pasadores, horquillas y cuadros. Convierte lo efímero de flores como buganvillas, geranios y verbenas en ‘eterno’ en creaciones como unos pájaros cuyas plumas son en realidad pétalos de colores superpuestos para lograr “auténticas maravillas”, señala Lucía Román, encargada de la venta en su jaima.
Son varios los talleres demostrativos que se van a desarrollar a lo largo de la Feria. Este sábado por la mañana, Amaya Meno, de Alokoala, mostró cómo crea un “elemento de juego” que es también “trapito de apego” para los niños como un conejito elaborado en “algodón cien por cien” con sonajeros, un chupete y mordedores de silicona y madera.
Cerámica, bolsos, camisetas personalizadas, zapatos artesanales, maquetas y cosmética natural también se hallan en la Feria de Amiarte que se celebra en horario de 11 a 14 y de 18 a 22.30 horas.