José Ruiz ya tiene unos cuantos tiros pegados en esto y no se pone nervioso a la hora de hablar de lo deportivo y de lo extradeportivo. Cargado de confianza tras una temporada de ensueño, el cierre del Viña Albali asegura estar preparado para arrancar “cuando sea”. Es lo que tiene haber tenido un parón en plena pandemia, haber estado confinado y haber preparado un play off exprés a contrarreloj y haber llegado lejos. Muy lejos. En definitiva, confianza es la palabra que define a José Ruiz.
“Esta situación es una incógnita para todos, es una situación que no es fácil por los rebrotes. Toca esperar a los que entiendan de esto y a los que tienen que poner medidas. Nosotros seguimos entrenando mientras nos mantenemos a la espera. Nos gustaría que la situación fuera normal. No queda otra que esperar”, explicaba el jugador catalán.
No obstante, aclaraba, “incertidumbre sí tienes, pero como venimos de jugar un play off exprés sin haber jugado amistosos pues parece que te da un poquito más de tranquilidad porque ha sido mucho más cercano y reciente. Cuando digan de empezar la liga no nos pillará de sorpresa porque estamos entrenando con normalidad. El haber jugado un play off exprés en estas circunstancias te da un poquito más de confianza”.
Hablando de las tensiones entre LNFS y RFEF, el cierre del Viña Albali comentaba que “el tema está muy complicado ahora mismo. Esto viene de lejos y este último año se ha acentuado mucho más. Los que lo tienen que solucionar que lo solucionen por el bien del fútbol sala, pero la situación del virus no ayuda para nada”.
Por eso, hablando de sensaciones, optimismo o pesimismo, José Ruiz reconocía que “no lo sé si arrancará o no la liga porque nadie sabe cómo va a actuar el virus. Nosotros estamos tranquilos porque hemos hecho pocos cambios, los chicos se están adaptando bien y el mantener el bloque te da confianza, pero creo que nadie sabe el futuro más cercano y de una semana a otra puede cambiar la cosa”.
Por último, y preguntado por el proyecto para este año, el veterano apuntaba que “hay que ser realistas. La temporada que hicimos el año pasado es difícil de repetir porque rendimos a un nivel altísimo. Tenemos que ser ambiciosos y estar tranquilos. Nos hemos reforzado bien y los chicos están trabajando bien”. Eso sí, mostraba su preocupación en caso de no haber afición en el pabellón. “Aquí en Valdepeñas no se concibe el fútbol sala sin afición. Sería muy raro y muy difícil. La afición es una de nuestras principales bazas y no tenerlos sería una pena”, finalizaba.