El partido entre el Viña Albali Valdepeñas y ElPozo que tenía que disputarse este sábado a partir de las 13 horas fue aplazado por el Juez de Competición de la RFEF ocho minutos antes de que comenzara el partido. Con ambos equipos calentando sobre la pista y con todo preparado para el encuentro, dicho juez mandó una resolución por la que se aplazaba el partido porque “…este Juez ha tenido conocimiento que tanto el jugador positivo como el contacto estrecho han viajado con el equipo y se encuentran en la ciudad de Valdepeñas” cuando en realidad no fue así ya que el positivo se encontraba en Murcia según la cuenta de Twitter de su club. Es más, en la tarde noche del sábado, el Juez de Competición rectificaba en su resolución y solo señalaba al contacto estrecho y no al positivo.
Sea como fuere, dicha decisión sorprendió al entorno del equipo vinatero ya que, según el protocolo, el partido se podía jugar una vez que el contacto estrecho quedaría aislado y el resto hubiera jugado al tener los negativos de los test de antígenos hechos en esa misma mañana.
Después de varias llamadas y reuniones sobre la pista del pabellón Virgen de la Cabeza, Luis Palencia, Joan Linares y David Ramos atendían a Lanzadigital para comentar lo sucedido.
En primer lugar, el presidente de la entidad matizaba, tras conocer la primera resolución, que “el positivo no viajó, fue el contacto estrecho. Otra cosa es que haya habido un error a la hora de transcribirlo por parte de Competición. Estamos a las órdenes de los que diga la RFEF con la cautela que esto lleva. Resignación y otro partido aplazado que tenemos pendiente. No queda otra”. En este sentido, Luis Palencia apuntaba que “estamos todos expuestos a que pueda pasar. El protocolo dice que si hay un contacto estrecho se aísla y ya está. Yo no pienso nada raro. Al parecer, todos han dado negativo y sí se podía haber jugado, pero si han considerado que había riesgo, acatamos la resolución”.
Hablando del filial y comparando el caso con el filial de ElPozo, según el mandatario, “nosotros también tenemos un filial e intentamos tener el mínimo riesgo posible. Miramos por el filial y miramos por el primer equipo”.
“Es un trastorno para todo el mundo esta suspensión, pero el mayor perjuicio lo tenemos ambos clubes que tenemos que buscar una fecha con un mes de febrero hasta arriba”, finalizaba.
Para David Ramos “el Covid es traicionero y complejo, pero para nosotros es una decepción porque teníamos mucha ilusión por el partido y creemos que, al final, desde mi punto de vista, más allá de cosas graves, hay que intentar aprender dentro de un orden con el bicho. Nos sorprende que minutos antes nos digan esto. Hay que aceptarlo porque somos unos mandados. Ahora a descansar y a prepararnos para un mes de febrero que va a ser muy duro”.
Preguntado por si hay algo detrás de todo esto, el técnico del Viña Albali reconocía que “quiero partir de la buena fe de la gente, pero quien la quiera preparar, la va a preparar si no la han preparado ya. Hay que buscar un equilibrio para que se juegue. En este caso estamos hablando de un contacto estrecho, no de un positivo. Estábamos predispuestos a jugar por la tarde o mañana, pero finalmente se deshizo esa posibilidad. Ahora nos va a tocar jugar cada dos o tres días. Es difícil, sí, pero también es una oportunidad y tenemos que prepararnos para ello”.
Por último, Joan Linares comentaba tras lo acontecido que “hay un protocolo reforzado que es el que nos rige a todos. El protocolo dice que hay que aislar a ese contacto estrecho. Hay una federación que es la que dictamina y nos dicen que se aplaza. Es un serio contratiempo en lo deportivo porque es un cuarto partido aplazado. Tenemos un mes de febrero loco, pero no nos queda otra que asumirlo. No vamos a darle más vueltas aunque cada uno tengamos nuestra opinión personal”.