El ministro de Consumo y coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha urgido a subir salarios, moderar los beneficios “abusivos” de las empresas y “hacer el trabajo compatible con la vida” para que los trabajadores puedan “desarrollar un proyecto que merezca la pena”.
Así lo ha subrayado en declaraciones a los medios de comunicación antes de la manifestación por el 1 de mayo en Madrid, donde ha reivindicado que la reforma laboral ha supuesto “un cambio de paradigma” tras el que “se entiende que la solución de los problemas de España pasa por la subida salarial, la mejora de la negociación colectiva y el fortalecimiento de la clase obrera organizada”.
“Este cambio de paradigma lo tenemos que seguir desplegando y expandiendo en el tiempo, y además tenemos que seguir incorporando y ampliando el elemento cualitativo, tenemos que volver a considerar el trabajo en toda su visión integral de la vida para entender que la clase trabajadora pueda trabajar para vivir y no necesariamente vivir para trabajar”, ha defendido.
Para Garzón, es necesario “entender el carácter del tiempo que se dedica a la vida. “Somos una sociedad que tenemos la necesidad de hacer el trabajo compatible con la vida, de poner la vida en el centro, de poner los cuidados en el centro y de ser capaces de cuestionarnos modos de vida como los actuales en los que la sociedad y la clase trabajadora no tiene tiempo para cuidar ni a los seres más pequeños de las familias ni a los seres más mayores de las familias”, ha apostillado al respecto.
A su juicio, esta dinámica es un “problema social” que se tiene que resolver “con regulación” y ante el que se debe “continuar desplegando ese nuevo paradigma de subidas de salarios y de una nueva forma de entender el trabajo, muy distinta a la forma neoliberal que ha acompañado desde la recuperación de la democracia hasta hace muy poquitos años”.
Por otro lado, Garzón ha hecho hincapié en el lema de la manifestación de este 1 de mayo, ‘Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios’, el cual considera “muy acertado”.
En este sentido, ha subrayado que “se trata de entender que los procesos de inflación están empujados y espoleados por unos incrementos de márgenes empresariales abusivos”. Para Garzón, las empresas “se aprovechan de circunstancias vividas en los últimos años para el incremento de los beneficios sobre las espaldas del poder adquisitivo de las familias trabajadoras”.
“Esto es algo que tenemos que ser capaces de resolver, especialmente desde el Gobierno, donde anteponemos el interés de las familias trabajadoras”, ha reconocido, para resaltar que también es necesario “diseñar mejores formas para que se redistribuya esa riqueza”.
Esta redistribución pasa, desde el punto de vista del consumo, por “los precios”, ha precisado, para concluir insistiendo en “subir salarios” y “moderar los beneficios”.
