El Gobierno de Hungría ha presentado un segundo paquete de medidas para prevenir un mal uso de los fondos europeos que incluye la creación de una autoridad independiente destinada a “prevenir, detectar y corregir las ilegalidades e irregularidades cometidas en el proceso de implementación de la ayuda comunitaria”.
Además, esta autoridad estará obligada a informar de los casos de fraude y corrupción a la Fiscalía Europea (EPPO, por sus siglas en inglés).
Hungría ha rechazado pasar a formar parte de la EPPO, que comenzó a operar en junio de 2021 en los 22 países-miembro que sí han decidido participar, lo que autoriza a la Fiscalía comunitaria a iniciar investigaciones en su territorio.
El Gobierno húngaro está bajo presión después de que la Comisión Europea le haya amenazado con retener 7,5 millones de euros que forman parte de su partida de fondos. La Comisión ha criticado ampliamente la corrupción generalizada en Hungría y ha concedido al país dos meses para remediar estos abusos.
Esta semana se presentó con anterioridad una primera pieza de la legislación propuesta para abordar las preocupaciones de la Unión Europea en materia de corrupción.
