El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha reconocido este jueves durante su discurso anual del Estado de la Nación la muerte de más de 30.000 palestinos en los bombardeos del Ejército israelí contra la Franja de Gaza, razón por la que ha pedido a Israel “proteger a los civiles inocentes” en sus operaciones contra el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
“Israel tiene una carga añadida porque Hamás se esconde y opera entre la población civil. Pero Israel también tiene la responsabilidad fundamental de proteger a los civiles inocentes de Gaza. Esta guerra se ha cobrado más víctimas civiles inocentes que todas las guerras anteriores en Gaza juntas. Han muerto más de 30.000 palestinos. La mayoría de ellos no son de Hamás. Miles y miles son mujeres y niños inocentes. Niñas y niños también huérfanos”, ha expresado durante su intervención ante el Congreso.
Asimismo, ha instado a Israel a permitir la entrada de más ayuda humanitaria y a controlar que los trabajadores humanitarios no se encuentren en situaciones de fuego cruzado.
“Casi dos millones más de palestinos bombardeados o desplazados. Casas destruidas, barrios en escombros, ciudades en ruinas. Familias sin comida, sin agua, sin medicinas. Es desgarrador”, ha añadido.
Sin embargo, ha vuelto a asegurar que Israel tiene el derecho de perseguir y acabar con la milicia palestina por los ataques del 7 de octubre”, en la que murieron 1.200 personas y fueron hechos rehenes otras 240, en lo que ha descrito como el “día más mortífero para los judíos desde el Holocausto”.
ALTO EL FUEGO Y LIBERACIÓN DE REHENES
En ese sentido, ha hablado de “cinco meses desgarradores” para israelíes, palestinos e incluso estadounidenses, entre las que hay familias que aún esperan la liberación de sus familiares retenidos por Hamás, asegurando que su Administración no descansará hasta lograr su vuelta a casa.
Biden ha destacado los esfuerzos de su Gobierno para lograr un alto el fuego de al menos seis semanas, que coincidiría con la celebración de la festividad del Ramadán, y que además permita la liberación de los rehenes.
Además, ha asegurado que Hamás “podría acabar con este conflicto hoy mismo liberando a los rehenes, entregando las armas y entregando a los responsables del 7 de octubre”. “De este modo, los rehenes volverían a casa, se aliviaría la intolerable crisis humanitaria y se avanzaría hacia algo más duradero”, ha agregado.
Respecto a la solución definitiva del conflicto palestino-israelí, ha vuelto a insistir en el reconocimiento de los dos Estados como única forma de “garantizar la seguridad y la democracia de Israel” y de “garantizar que los palestinos puedan vivir en paz y dignidad”.
AMENAZA EN EL MAR ROJO
Por último, Biden ha expresado que la estabilidad regional pasa por “contener la amenaza” de Irán, razón por la que ha creado una coalición internacional para proteger la libertad en el mar Rojo, donde los rebeldes yemeníes hutíes, apoyados por Teherán, atacan buques comerciales e incluso militares que consideren relacionados con Israel, Estados Unidos o Reino Unido.
“He ordenado ataques para degradar las capacidades de los hutíes y defender a las fuerzas estadounidenses en la región. Como comandante en jefe, no dudaré en ordenar nuevas medidas para proteger a nuestro pueblo y a nuestro personal militar”, ha afirmado.