Casi un centenar de personas, padres y madres y sus hijos e hijas, han participado en la Gymkana Medioambiental en familia que ha organizado la concejalía de Infancia y el área de Medioambiente del ayuntamiento de Alcázar de san Juan, en el parque Alces con el objetivo de concienciar y dar a conocer la variedad de flora y fauna que esconde al parque.
El Ayuntamiento de Alcázar de San Juan sigue trabajando para que todos los niños y niñas conozcan los recursos de que dispone el parque Alces. Aunque el parque es de sobra conocido y disfrutado por todos, “estamos realizando una actividad especial, en ese caso de medioambiente” explica la concejala de Infancia, Alba Castellanos que dice que “es especial porque más de 40 niños y niñas están disfrutando con sus padres y madres, más de 90 personas en total, de una gymknana medioambiental en la que podrán superar pruebas relacionadas con la flora y la fauna del parque”. Podrán trabajar también el conocimiento y respeto al medioambiente, apunta.
Este tipo de actividades surgen en colaboración de las concejalías de Infancia y el área de medioambiente. Se realizan dos actividades a lo largo del año, una en noviembre, el Día de los derechos de la Infancia y ésta como inicio de la temporada de verano.
Se trata de una actividad que ha superado todas las previsiones; apunta la concejala que “había 25 plazas que han tenido que ser ampliadas a 40 ante la gran demanda”, “estamos encantados y no queríamos dejar a nadie fuera”. Las edades en las que han podido participar van desde los 3 a los 12 años.
El educador medioambiental Pablo Pichaco explicaba que ha habido mucha afluencia de chicos de corta edad. Las actividades pretenden que las familias jueguen juntas “hemos visto que juegan en paralelo pero queremos que jueguen en grupo”. Todos los años se hacen actividades, para este año, con el calor se ha pensado que trabajan con nieve, que haganactividades relacionadas y que creen volcanes como los de la provincia de Ciudad Real. OPtra de las actividades se ha denominado “Busca y encuentra”, hay que encontrar piñas de varias especies, hojas del pan y quesillo, la tradicional falsa acacia, plumas de aves y canicas, que eran elementos populares pero que los chicos ya no saben para qué sirven. Para terminar habrá también juegos de agua “en los que los padres acaban mojados”.
Los chicos hoy se van a quedar con que no solo es un parque de patos y que no solo hay pinos, dice Pichaco. A los padres también les viene bien porque descubren las posibilidades del parque, conocen la diversidad y lo que el parque esconde.
