“Soy lo que soy como actriz y como persona por esos años en la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) y por esos veranos en Almagro”. Con estas palabras ha recibido esta tarde la actriz Adriana Ozores (Madrid, 1959) el XIX Premio Corral de Comedias del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, un galardón que “me ha sabido a gloria”.
La galardonada, visiblemente emocionada y agradecida, ha vinculado su perfil interpretativo a la saga familiar, “con un ADN maravilloso”, que le ha precedido, aunque desde sus inicios eligiera abrir una nueva ventana interpretativa, alcanzada gracias a sus años de clásico, en los que recaló en Almagro.
Precisamente, el festival ha reconocido con el premio “su trayectoria profesional y su vinculación al Siglo de Oro”, ya que entre los años 1988 y 1996 estuvo estrechamente vinculada a la CNTC, en la etapa de Adolfo Marsillach, cuando dio vida a personajes de obras como ‘La Celestina’; ‘El vergonzoso en palacio’; ‘El alcalde de Zalamea’; ‘El desdén, con el desdén’; ‘El médico de su honra’; ‘Don Gil de las calzas verdes’ o ‘El Misántropo’.
En esa etapa, entre los 80 y 90, “aprendí este oficio y la magia de lo que pasa aquí”, al lado de figuras como Jesús Puente, Aitana Sánchez-Gijón, José Luis Alonso de Santos, Amparo Rivelles o Carlos Hipólito.
“Éramos una tribu y recuerdo nuestras mañanas en la piscina, los ensayos, las cenas y noches eternas bajo las estrellas de Almagro”, ha evocado, a la vez que ha tenido palabras para su mentor, Marsillach, en quien “encontré su respeto y admiración”.
Con el dramaturgo contribuyó a elaborar “un teatro en mayúsculas, con una mirada internacional, ambicioso y barroco”, ha señalado antes de recibir una ovación de varios minutos de aplausos.
Ozores, una de las damas de la escena española, también es uno de los referentes de la cartelera española con más de cuarenta películas, entre las que destacan ‘La hora de los valientes’, de Antonio Mercero; ‘Plenilunio’ de Imanol Uribe o ‘Heroína’, de Gerardo Herrero.
En televisión destacan sus personajes en series de ficción tales como ‘Periodistas’, ‘Los hombres de Paco’, Gran Hotel o Velvet Colection.
Están en el gran momento
Previamente, la escritora Elvira Lindo ha pronunciado la laudatio para “celebrar tu talento”. HA reconocido su talento y vida profesional porque “cuando supe que te habían dado este premio, me pregunté cómo no lo habías recibido antes. Y quise achacarlo a que a vista de cualquiera aún te queda mucho tiempo y trabajo por delante”.
“Estás en el gran momento de Adriana Ozores”, en esa “etapa de la vida en que una parece dueña de su destino”.
Ha recordado los inicios de su relación en la CNTC “cuando prestaste voz a la Melibea de ‘La Celestina’ y la Isabel de ‘El Alcalde de Zalamea’, a la actriz brillante, tozuda, trabajadora, inconformista, estudiosa, en la que gracias al teatro clásico te irías convirtiendo”.
“Intuyó Marsillach que esa joven se convertiría en su cómplice durante una década, escuchó la voz de aquella joven aspirante y percibió de inmediato la musicalidad natural de su habla, y se fijó en su cuerpo fuerte y flexible, y en ese rostro en el que los rasgos son grandes y expresivos, los ojos parecen estar creados para iluminar la última fila del patio de butacas y de la boca brota fácil una sonrisa grande”.
A su juicio, Marsillach “ supo ver en ti, Adriana, lo que luego los demás disfrutaríamos”, un talento natural y también heredado “de tus mayores”, por lo que aunque “podrías haber sido muchas cosas” pero un día “abordaste el arte de la interpretación de un modo radicalmente distinto”, para Lindo “rebeldía, inconformismo, y coraje”.
Tras destacar la valentía en sus interpretaciones, ha asegurado que Ozores se “ha ido engrandeciendo con el paso de los años”, así como a ojos de la literata atraviesa la vida como una heroína, “como todas esas heroínas a las que has encarnado”.
En este trance interpretativo de décadas “se ha construido en ti un ser humano precioso, delicado y tenaz, que merece la pena conocer”.