La Asociación de Vecinos de la Aldea de Ciruela en Ciudad Real ha denunciado a través de las redes sociales y tras ponerlo en conocimiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado el robo de una antigua piedra de molino, considerada de época romana, que se encontraba en las inmediaciones de los restos del castillo de la aldea de Ciruela, ubicada a unos seis kilómetros de la capital provincial.
Según ha narrado a Lanza el presidente de la recién creada asociación vecinal, Marcial González Rivero, hace un par de meses, para dar a conocer el patrimonio arqueológico de la zona, publicaron en las redes sociales una fotografía de esta antigua piedra de molino, que según un informe realizado por un arqueólogo es de época romana. Sin embargo, durante el fin de semana se han percatado de que ésta ha desaparecido.
Según González, la piedra, “que lleva ahí toda la vida”, ha sido retirada con maquinaria pesada, pues su dimensión será de, aproximadamente, un metro cúbico y su peso será de varias toneladas.
Tanto la piedra de molino como las ruinas del antiguo castillo de Ciruela se encuentran en terrenos de propiedad privada, “lo cual no quiere decir que los restos hallados en su interior pertenezcan al dueño de la finca en cuestión”, apunta el presidente de la asociación. “Eso es como si te encuentras un mosaico romano enterrado en tu finca y lo trasladas a tu chalet”, añade González, quien señala que han sido asesorados por un arqueólogo que afirma que la retirada de este tipo de elementos está prohibida por ley.
Desde la asociación vecinal, pusieron los hechos en conocimiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para que éstas “tomen cartas en el asunto”, pues consideran que se está incumpliendo la ley y no se está salvaguardando el patrimonio histórico de la zona.
Piden que el castillo sea catalogado como BIC
Así mismo, el presidente de la asociación ha indicado que las ruinas del antiguo castillo de Ciruela, construido en el siglo XI, deberían de ser catalogadas como Bien de Interés Cultural (BIC) para evitar expolios “y que no ocurran sucesos como el de la piedra del molino”.