Pregunta: ¿En qué consistió tu número?
Respuesta: Salí al escenario con un libro en blanco de unas 250 páginas que tenía la peculiaridad de que, si escribías en su portada cualquier título, se transforma. Pasaron varios espectadores con nueve novelas en total y me pidieron, por ejemplo, que se convirtiese en el Fantasma de la Opera, página 81, quinto párrafo. Entonces yo abrí mi libro blanco y, efectivamente, estaba esa página y ese párrafo. Lo repetí varias veces para que vieran que no les mentía. Fue muy complejo poder crear esa ilusión.
P: ¿Cuánto tiempo te llevo perfeccionarlo?
R: La idea la tenía desde hace bastante. No estaba finalizada puesto que un concepto tan complejo no se desarrolla de golpe, sino que se te van ocurriendo pequeñas cosas y las vas anotando. A partir de esto fui componiendo mi show. No obstante, tuve que preparar el acto en tiempo récord. Solo pude practicar durante tres meses muy intensos.
P: ¿Habías participado anteriormente en la competición?
R: No. Es la primera vez que compito a nivel nacional. El Congreso Nacional de Magia es una vez al año. Es como las olimpiadas de la magia. Tuve la suerte de presentar la actuación un mes antes en el Toledo Ilusión. Es un certamen de magia un poco más a pequeña escala y quedé subcampeón.
P: ¿Te pusiste nervioso antes de salir al escenario?
R: Los días previos, por no decir las semanas, han sido muy estresantes. Han sido a base de ibuprofenos diarios. El día de antes de mi prueba sentía que me explotaba la cabeza. Mi mayor miedo era equivocarme y que se viera el truco. A esto se le añade la presión del tiempo. Para la competición había que preparar un acto de entre 5 y 10 minutos. Las reglas son muy estrictas. Si no te ajustas a ese margen, quedas descalificado.
P: ¿Cómo se desarrolló el certamen?
R: El miércoles fue la llegada. Empezó el jueves a mediodía y terminó el sábado por la tarde. Tanto por la mañana como por la tarde había competiciones, galas y conferencias. Hubo unas seis jornadas. La cantidad de participantes de este año no ha tenido precedentes. Normalmente los ganadores repiten su propuesta al final. Esta vez no fue posible debido al gran número de concursantes. El evento tuvo lugar en la Feria de Muestras de Valladolid y se utilizaron dos salas distintas: una más pequeña dedicada a las actuaciones de micromagia y otra con una capacidad de 500 personas. Yo hice mi número en la última.
P: ¿Y tú actuación?
R: Mi número ha sido muy aplaudido en el Campeonato Nacional, y magos de todo el mundo me han felicitado por mi trabajo. Como resultado, he obtenido la puntuación más alta de España en mi categoría con un Segundo Premio Nacional de mentalismo, pues el Primer Premio quedó desierto.
Un logro bastante considerable teniendo en cuenta que dicha categoría contaba con un total de 10 participantes, una cantidad sin precedentes en la historia de 38 Congresos Mágicos Nacionales.
P: ¿Existen diferentes categorías en los concursos?
R: Claro. Mi número no tenía nada que ver con uno de cartomagia. No se pueden comparar. Es como si pones a competir juntos a los deportistas de salto de pértiga con los que levantan pesas. No tiene sentido. La categoría depende del tipo de ilusionismo que realices. En total hay unas 11 o 12 categorías. Yo participe en la de mentalismo.
P: ¿En qué se diferencian el ilusionismo y el mentalismo?
R: El mentalismo abarca todo lo que tenga que ver con supuestos poderes mentales o capacidades sobrenaturales. Incluye transmisión mental, adivinación, telequinesis… Por su parte, el ilusionismo es lo más genérico. Podríamos decir que es el arte en su totalidad y el mentalismo es una de sus ramas.
P: ¿Practicas alguna otra rama del ilusionismo?
R: Sí. Ayer un colega mío comentaba que es un artista zapping porque le gusta catar un poco de todo. A mí me pasa lo mismo. Me encanta la magia cómica, el mentalismo, las cartas… Soy incapaz de elegir porque me apasiona todo.
P: ¿Cómo te empezó a interesar el tema?
R: Llevo con la magia desde los seis años. Empezó como afición. Mi padre, Venchi, fue mi primer maestro. Él compagina la magia con su profesión que era la abogacía. Ganó tres premios nacionales de mentalismo que es, de hecho, en la misma categoría en la que he participado yo.
P: ¿Te dedicas a esto exclusivamente?
R: Sí. Hace unos ocho o nueve años me vine a vivir a Madrid porque en Ciudad Real es muy complicado subsistir con esta profesión. Aun así, voy allí con mucha frecuencia. Trabajo a menudo con convenios culturales de la Diputación de Ciudad Real y en diferentes pueblos durante el verano.
P: ¿Actualmente en qué estás trabajando?
R: Siempre estoy trabajando en ideas nuevas y creando cosas, y por supuesto, no dejo de hacer eventos de todo tipo. También he tenido mi espectáculo familiar fijo durante cinco años en el teatro La Escalera de Jacob, en el centro de Madrid.
P: ¿Qué objetivo tienes de cara al futuro?
R: No cabe duda de que ganar el campeonato ha sido el hito más importante de mi carrera. Creo que necesito un poco de tiempo para digerir lo que ha pasado. Siento que esta experiencia me ha servido muchísimo para mostrar mi trabajo a la comunidad mágica y también me ha ayudado a creer más en mí mismo. Es solamente el principio. Este mundillo es una carrera de fondo. No acaba. He ganado en España, pero después hay competiciones europeas y, más tarde, mundiales.