La inauguración de la exposición de los talleres del Centro de Mayores y la entrega de premios de los distintos torneos y campeonatos, han puesto este viernes el punto final a las Jornadas de Participación de los Mayores. El alcalde, Leopoldo Sierra, ha sido el encargado del corte de cinta que abría el acceso a una muestra que cada año aumenta en su extensión. Le han acompañado la concejal de Servicios Sociales, Alicia Loro, y la directora del centro, Prado Pérez de Madrid, quien valoraba el resultado del trabajo realizado a lo largo del año. Unas actividades que, decía, “les sirve para mantenerse activos, socializar, ejercitar la memoria y no perder autonomía”. Los mayores son, además, “un colectivo muy participativo tanto en el centro como en el resto de vida del municipio”, subrayaba.
María del Carmen Torija, monitora de los talleres, explicaba que este año se ha recuperado el taller de mantones de manila y se ha llevado a cabo uno nuevo de imprimación. También ha recordado la participación de los talleres en el proyecto ‘Sombras de Igualdad’, representado en la exposición, así como en el encuentro intergeneracional entre nietos y abuelos, y “en todo lo que se demanda por parte del centro y del Ayuntamiento”. Por su parte, la concejal de Servicios Sociales señalaba que “nuestros mayores son cada vez personas más activas y es responsabilidad del Ayuntamiento dar respuesta a sus demandas”, valorando, a su vez, la calidad de los trabajos realizados.
Por último, el alcalde felicitaba tanto al centro de Mayores y a sus profesionales “por su capacidad de trabajo y dinamismo”, como a los propios usuarios, “por su implicación en los talleres y actividades”. Un tándem que da como resultado exposiciones como la que se ha inaugurado hoy y que estará abierta durante toda la feria.
Una vez finalizada la visita a la exposición, y tras una pequeña actuación de la Rondalla de Mayores, Sierra y varios miembros de la Corporación Municipal han entregado los premios de los torneos que se han realizado durante estas dos últimas semanas. Finalizaba así una mañana que comenzaba con la celebración de una misa por los difuntos del centro en la parroquia de Santa María.