Y se hizo la luz. La Solana anticipó el encendido del alumbrado especial de Navidad al uno de diciembre, antes que nunca, aprovechando el tirón del fin de semana previo al puente de la Constitución y la Inmaculada. Además, esta vez el brillo de la iluminación callejera llegó acompañado por dos eventos paralelos: un mercadillo en la Plaza Mayor y una feria en la explanada del mercado municipal. Medio kilómetro de distancia unido por la arteria principal de la ciudad, la calle Carrera, que durante varias horas se convirtió en un hervidero de gente yendo y viniendo, incluido un trenillo infantil. Sí, fueron miles las personas que este viernes salieron al calor de las luces y de la novedosa feria invernal.
A las 6 en punto de la tarde, la alcaldesa presidió el encendido oficial del alumbrado. Luisa Márquez pronunció unas breves palabras por megafonía, en las que citó a Walt Disney para decir que “todos los sueños se hacen realidad si tenemos el coraje de luchar por ellos”. Un mensaje que dedicó a Santiago López, hoy concejal del equipo de gobierno y cabeza pensante de las novedades que se ponían en marcha esa misma tarde.
A esa hora, mucha gente ya visitaba las coquetas casetas de madera que salpicaban la Plaza Mayor, donde varios comerciantes exhiben y venden sus productos. Otra novedad era el belén con figuras a tamaño real instalado al abrigo de la fachada norte de Santa Catalina, bajo la torrecilla del reloj. Y tampoco pasaba desapercibido el gran trineo instalado en el otro extremo, donde muchos niños jugaban y sus padres fotografiaban sin cesar. Eran cientos los móviles tomando imágenes y haciendo selfies en el belén, en el trineo, en las casetas… y por supuesto bajo la gran bola de luces blancas que preside el centro de la plaza, una especie de ‘guinda’ al pastel luminoso.
Y mientras la gente miraba, remiraba y comentaba, los voluntarios de la Asamblea Local de Cruz Roja no daban abasto en el reparto de chocolate con tallos (churros en solanero) bajo los soportales del Ayuntamiento. Una cola interminable de gente aguardaba paciente su vasito de chocolate y sus dos tallos, previa compra de su tique al precio de 3 euros. El éxito de la iniciativa solidaria fue completo, solo a falta de conocer los datos concretos.
A medio kilómetro, la explanada del mercado municipal también bullía. El trenillo infantil iba cargando y descargando niños, muchos de los cuales buscaban su momento para subir en las atracciones de esta nueva miniferia invernal. Algunos decían en tono jocoso que Santiago y Santa Ana habían hecho una ‘escapada’ a mitad de camino hacia la próxima feria de julio. Aunque la noche era fresca, había suficiente templanza para que los castillos hinchables, el sky jumper o las camas elásticas fueran un hormiguero de chavales pasándolo en grande. Mientras, muchos compraban patatas asadas o churros para calentar el gaznate.
Tanto el mercadillo de la plaza como la feria del mercado seguirán hasta Reyes, al igual que el alumbrado especial. Este año se han colocado 40 arcos de luces que adornan las principales calles del casco histórico, caso de Sagrario, Cervantes, Feria, Carrera, Pacheco o Concepción. El perímetro de arcadas de la Plaza Mayor está rodeado por guirnaldas de luces, gotas de nieve luminosas y un gran cartel en el balcón principal del Ayuntamiento con la leyenda ‘Felices Fiestas’, amén de una gran bola en el centro.
El concejal de Promoción Económica y Turismo, Santiago López, explicó a la prensa que el objetivo es dinamizar La Solana en todos los sentidos, tanto comercial como hostelero y turístico, ofreciendo una oferta global no solo para los solaneros, sino también para el resto de la comarca. El empeño –dijo- es seguir creciendo en años sucesivos.
